La feria de San Juan desborda la previsión de los floristas

B.G.R.
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El mercado navideño celebrado por primer vez en el patio del cenobio supera la afluencia de visitantes e incrementa un 20% las ventas respecto a su anterior ubicación en Castilfalé

La decoración e iluminación del espacio sorprendió a los visitantes durante la celebración de la muestra el pasado puente de la Constitución. - Foto: Patricia

«Ni en nuestras mejores expectativas nos hubiéramos imaginado esta respuesta de público». El vicepresidente de la Asociación de Floristas y Jardineros de Burgos (Flojabur), David Ruiz, valora de esta forma la Feria Florista de Navidad que el miércoles se clausuró en el patio del Monasterio de San Juan. Este nuevo emplazamiento ha supuesto un éxito rotundo tanto de visitantes como de ventas, superándose los 9.000 de la anterior localización, el Palacio de Castilfalé, y en un 20% su facturación.

En tan solo tres días de duración (se inauguró el lunes) y a pesar de la adversa meteorología, la afluencia de personas fue continua tanto en horario matutino como vespertino, sobre picos máximos entre las seis y las ocho de la tarde. «Hemos recibido el cariño de la gente y muy buenas críticas en las redes sociales», señala Ruiz, quien, al margen del balance positivo de la muestra, manifiesta que uno de los aspectos más relevantes ha sido el de «demostrar las posibilidades que tiene este espacio ubicado en el centro de la ciudad a la hora de organizar distintos tipos de eventos».

Uno de los mayores atractivos de la feria fue el homenaje que los floristas realizaron a la Catedral por la celebración de su VIII Centenario. Con más de 7.000 claveles rojos y rosas traídos de Cádiz, se confeccionó una recreación de la Seo que captó la atención de los visitantes y fue el objeto principal de sus fotografías. También despertó la curiosidad el montaje realizado con las letras de Burgos en cartón y flor de algodón, que el colectivo ha propuesto ceder al Ayuntamiento para trasladarlo al mercado del paseo del Espolón en estas fiestas. La ornamentación del patio se completó con la ornamentación de los arcos y un parterre con distintas especies arbóreas en el centro, así como los cuatro puestos de venta de plantas y artículos decorativos.

Tras desmontarse ayer, los árboles se plantarán en distintos jardines de la ciudad, mientras que el resto de la decoración se aprovechará para los mercados de abastos, de tal manera que se reutilizará el 90% del material empleado. Ruiz apuesta por mantener la ubicación del monasterio de San Juan en próximas ediciones, si bien apunta a distintas posibilidades de mejora. En este sentido, aboga por aprovechar este espacio para abrirlo a otros gremios que trabajen con artículos relacionados con estas fechas festivas una vez que finalice la muestra de los floristas. De esta forma, se «podría aprovechar toda la decoración para hacer una feria navideña de productos locales».