Carmelo Palacios

Plaza Mayor

Carmelo Palacios


Los niños ya no quieren ser futbolistas

16/07/2020

No peco de ser una persona cotilla, pero reconozco que disfruto acercando la oreja mientras yazco tirado en la arena de la playa. Y me he dado cuenta de que se podría hacer un estudio sociológico muy interesante. Allí, está representada la familia con abuela, hijos, nietos y cuñados, el grupo de amigos y la parejita feliz. Un retrato auténtico de la sociedad española que está cambiando en muchos aspectos, pero que en otros tantos sigue exactamente igual.

Para empezar, los niños ya no quieren ser futbolistas. Quieren ser youtubers. Se lo oí a dos o tres que zascandileaban con las palas mientras sus abuelas o tías les miraban con cara rara. «Lo primero que tendrás que hacer será estudiar para ganarte la vida», le espetó una de ellas. «Así se gana mucho dinero», respondió de inmediato citando a algunos ‘genios’ de internet que yo desconozco pese a que soy Millenial, por los pelos, pero Millenial.

Más castizo era el plan de tres parejas de cuarenta y tantos, que habían encargado una paella y le iban a decir al restaurante que habían cambiado de planes. Que se quedaban en la playa con un bocata. Los tres maridos subieron por las dunas obedeciendo a sus parientas para dar la mala noticia al hostelero. «Eso sí, sobre las seis nos subimos para tomarnos unos pelotazos», sentenció uno de ellos. Eso no cambia, aunque estemos en pandemia.

Tampoco varía mucho el plan del grupo de colegas, salvo porque ahora aburren con el reggaeton. Siempre hay alguien que falta, por el motivo que sea, y se convierte en un saco de boxeo. No sé quién sería el tal Dani, pero con amigos así, uno no quiere enemigos. No sea cotilla, no le voy a contar lo que dijeron de él. Mejor, pruebe a hacerlo usted un día de estos de verano y descubra sus propias historias. Si tiene suerte, no hablarán en euskera.