Un papel cultural protagonista

ALMUDENA SANZ
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El Archivo Municipal prestó 162 piezas de distinta naturaleza para 13 exposiciones de Burgos y Valladolid en un año en el que las consultas al catálogo en línea continuaron en ascenso

El fichero de Anselmo Salvá se expuso en la muestra ‘La ciudad’, celebrada en el Arco de Santa María hace un año, comisariada por este servicio. - Foto: Jesús J. Matías

Al margen de los dimes y diretes de su ampliación, que va paso de superar el récord de la obra del Escorial, el Archivo Municipal terminó 2021 con el adiós definitivo a la pandemia, un continuo crecimiento en las visitas al catálogo online y a la página web y una insólita cifra de material prestado. La aportación de 162 piezas de distinta naturaleza (cuadros, muebles, carteles, grabados y dibujos, libros, revistas, fotografías y documentos) a 13 exposiciones celebradas en la ciudad y en la provincia y en Valladolid dan a Castilfalé un papel protagonista en la vida cultural del último año. 

«Se ha cedido mucho material, de forma inusual. En el tiempo que llevo aquí, nunca se había pedido tanta documentación como ocurrió en 2021. Y está muy bien que los saquemos a airear», destaca su directora, Yolanda Rodríguez, quien asienta el motivo de tantas solicitudes en el «importante escaparate» de sus fondos que es el catálogo en línea, «la gente pincha y ve lo que tenemos con facilidad», que en este último año siguió sumando clic hasta las 274.000, 67.000 más que en 2020. 

El octavo centenario de la Catedral ha acaparado el grueso de estos préstamos. El Archivo Municipal jugó de titular en la exposición Burgos, 1921: cuando la Catedral celebró sus 700 años, que se desplegó por distintas salas de la ciudad entre el 16 de febrero y el 2 de mayo. Se encargó expresamente de la documentación e investigación de La ciudad (Arco de Santa María), donde llevaron algunas piezas que no habían salido antes, con curiosidades más allá del puro documento. Y sus fondos contribuyeron al relato en El mundo rural, el mercado de abastos norte y el transporte en Burgos en 1921 (Monasterio de San Juan); Las infraestructuras en el Burgos de 1921 (Casa de Cultural de Gamonal); Una mirada a nuestros libros (Monasterio de San Agustín); Una exposición para un centenario. 1921 (Consulado del Mar); Vida Cultural en los años 20 (Teatro Principal); y la ambientación de la calle La Puebla y el trampantojo colocado en la entrada de la actual Biblioteca Pública, antiguo Hospital de San Juan. La aportación a esta propuesta se completó con dos capítulos del catálogo. 

Su apoyo al aniversario del templo Patrimonio de la Humanidad quedó patente igualmente en su colaboración con Fernando III Rex Hispaniae en Burgos. Historia, memoria e imagen (Fórum Evolución, del 14 de septiembre al 14 de marzo); Así la vieron, así la ven (Museo de la Evolución y Fórum, del 6 de mayo al 7 de noviembre) y Goya, los desastres de la Guerra (Sala Pedro Torrecilla, del 10 de septiembre al 14 de noviembre), en la que contextualizaron el momento con documentos curiosos como la solicitud al gobernador francés de que retirara los cadáveres colgados en la Plaza Mayor. 

Otras dos efemérides llamaron a su puerta. La Fundación Castilla y León reclamó el documento de excomunión de Los Comuneros para la muestra Comuneros: 500 años, celebrada en el vestíbulo de las Cortes del 22 de abril al 20 de septiembre, y a la exposición Santo Domingo de Guzmán, los orígenes de un santo universal, que tuvo lugar en el Monasterio de las Dominicas de Caleruega, del 6 de agosto al 14 de noviembre, viajó un privilegio rodado de la época. 

Escolares y redes sociales. Rodríguez llama la atención sobre esta actividad como una de las patas de la misión de difusión y divulgación del Archivo Municipal. Recuerda que el afán de este servicio por acercarse a la sociedad se declaró desde el minuto uno, con la implantación del programa Un Archivo para todos, en el que se vuelcan todos los trabajadores. 

A esta misión obedecen estas colaboraciones culturales, las visitas a Castilfalé, el desarrollo de los programas didácticos, su presencia en las redes sociales...

Tras el largo parón provocado por la pandemia, los escolares regresaron el pasado noviembre a las instalaciones de la calle Fernán González, todavía con un aforo reducido, por lo que en 2021 esta actividad se desarrolló sobre todo en su formato telemático. Incluso se estrenó un taller, El desentierro de los huesos del Cid, que se puede realizar íntegramente por internet. 

Y aunque el viaje que permite al pasado es uno de sus grandes atractivos, el Archivo Municipal ha sabido ser un servicio de su tiempo y hacerse un hueco en las redes sociales del siglo XXI, con un número in crescendo de usuarios. La crisis supuso un revulsivo y ha mantenido la línea ascendente, con subida en Twitter e Instagram.