El aeropuerto de Villafría se ha quedado sin Air Nostrum. Este pasado viernes tuvo lugar el (por ahora) último vuelo de la filial de Iberia que opera rutas regionales. La capital burgalesa pierde así el único enlace regular de pasajeros que venía manteniendo en los últimos tres años, la conexión con Barcelona-El Prat. Pero la terminal aérea no se queda vacía, ni mucho menos.
FlyBySchool, la escuela de pilotos que llegó a finales de 2019, dispondrá en solitario de la terminal y las pistas y seguirá proporcionando una intensa actividad a las instalaciones, por donde pasan periódicamente sus alrededor de 240 alumnos que cada vez generan más movimiento. La empresa explica que a lo largo del año 2021 sus operaciones se han duplicado y esto les ha permitido convertirse en la primera escuela de pilotos española, algo que lograron en el mes de septiembre.
Según los datos oficiales de AENA, entre enero y noviembre el número de aterrizajes y despegues en el aeropuerto de Burgos ha alcanzado los 16.362, lo que supone un 50% más que el año anterior (aquí están incluidos todos los vuelos y no solo los de FlyBy). Esto permite que el de Villafría sea el 19º aeropuerto de la red estatal con más operaciones, justo después de una infraestructura de mucho mayor tamaño como Bilbao y por delante de Vitoria, Córdoba, Zaragoza o Almería, que sin embargo tienen muchísimos más pasajeros.
FlyBy aterrizó en Burgos procedente de León, donde el carácter militar de las instalaciones generó problemas de convivencia, Este año también ha batido su récord de nuevos alumnos al sumar 155 y no deja de pensar en crecer.
Por un lado, tal y como este periódico ya publicó en junio, está tanteando junto a la sociedad pública Cetabsa la construcción de un nuevo hangar en la ampliación del puerto seco, con el objetivo de levantar una gran nave donde emplazar en el futuro una escuela de mecánicos. Por otro, por si esta vía no sale adelante, también han solicitado a AENA una pequeña construcción en la zona de la terminal de carga que se sitúa junto a la terminal nueva.
Y todo con el objetivo de ampliar espacios, porque ya no caben en el edificio actual, pues cabe recordar que esa misma terminal de carga ya está siendo utilizada por FlyBy como emplazamiento de dos simuladores de vuelo y un aula de formación. Pese a estas dificultades de espacio, el responsable de la empresa, Álex Álvarez, asegura estar "encantado con Burgos en muchos aspectos, como las facilidades que nos ha dado durante estos años el aeropuerto o la residencia en la que se alojan los alumnos".
Por el contrario, como aspecto negativo, señala la meteorología de la ciudad. Poco se puede hacer contra ella, pero en algunos meses del año dificulta muchísimo la continuidad de las operaciones y su seguridad. De su relación con el Ayuntamiento asegura que "todo son buenas palabras" por parte de los políticos, aunque luego no sean capaces de responder siempre afirmativamente a sus peticiones como la que lleva meses demandando para que la línea de autobús de Castañares entre y salga al aeropuerto para dar servicios a los alumnos.
Abogan por París. Además, hasta ahora, en los pocos momentos que había vuelos comerciales, la categoría de control aéreo que se aplica en Villafría les paralizaba media hora antes de cada llegada y media después de cada salida, pues tenían que salir del espacio aéreo a una distancia mínima de 14 millas. Desde este fin de semana ya no tendrán ese problema, que el propio Álvarez señala como algo anecdótico dada la escasísima frecuencia que mantenía Air Nostrum.
De hecho, el gerente de FlyBy subraya que para sus propios intereses es conveniente "que el aeropuerto tenga más vida", pues daría facilidades de desplazamiento a sus alumnos que, en su inmensa mayoría, proceden de países extranjeros y sobre todo de Oriente Medio.
"Nuestros chavales serían potenciales clientes de un vuelo a París, por ejemplo, así que animo a los responsables de Promueve Burgos (la empresa pública municipal que se encarga de la promoción aeroportuaria) a que lleve a cabo negociaciones con las compañías aéreas para lograr conexiones internacionales".
Pese a que los contratos de alquiler de espacios que mantiene con AENA tienen una duración concreta, FlyBy se plantea continuar en Burgos de manera indefinida. "Nuestra mente no está en el corto plazo", subraya Álvarez. El año pasado abrieron una segunda sede complementaria en el aeródromo de Soria, pero por el momento Burgos es su base principal y así debería continuar, salvo sorpresa mayúscula.