La educación respecto al trato con los animales ha dado un vuelco en los últimos años. De ser herramientas de trabajo, meros objetos decorativos o instrumentos para el aprovechamiento humano han pasado a convertirse en «seres sintientes». En diciembre, una modificación del Código Civil, la Ley Hipotecaria y la Ley de Enjuiciamiento Civil sobre el régimen jurídico de los animales ya introdujo importantes modificaciones. Está en marcha una nueva normativa sobre bienestar animal. Y ambos cambios legales vienen a reflejar una tendencia creciente en la sociedad.

La mayor concienciación ciudadana está provocando que en los últimos años se incrementen las denuncias sobre maltrato y abandono animal. Es una tendencia creciente que se observa a nivel de toda España y que, según los datos del Seprona, también se concretan en la provincia de Burgos.

En los últimos tres ejercicios completos, entre 2019 y 2021, la Guardia Civil ha registrado 40 detenidos e investigados por maltrato o abandono animal. Fueron 13 hace tres años, la cifra cayó a 9 en el año del primer envite de la pandemia y volvieron a subir a 12 en 2021. En este último caso, además, la estadística distingue por primera vez entre abandono (3 casos) y maltrato (9).

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