"De la Rosa no ha sido sincero sobre con quién pactaría"

Á.M.
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Raúl Salinero ha pasado los últimos ocho años en la oposición con dos proyectos diferentes. Ahora regresa a las urnas pidiendo el respaldo del «voto útil» como candidato a la Alcaldía por Podemos Burgos

"De la Rosa no ha sido sincero sobre con quién pactaría" - Foto: Alberto Rodrigo

Su primer intento, en 2011, parecía anecdótico, pero logró recuperar la representación de IU en el salón de plenos. El segundo fue a lomos de una ‘confluencia’, Imagina, que estuvo cerca de ser la segunda fuerza más votada. Ahora dice estar en el Partido que siempre quiso. Lo que está acreditado es que ya no es el novato en el ruedo municipal.

Tercera candidatura y con tres siglas diferente...

La del medio fue una coalición política. Soy hijo del tiempo político que vivimos. En 2011 irrumpió el 15-M, que rompió la lógica del bipartidismo, y siempre he tenido unos principios que no encajaban mucho con IU. Si en 2011 hubiera existido Podemos yo habría estado en Podemos.

¿Por qué deberíamos votarle a usted y no a Imagina?

Porque la solvencia la ha demostrado Podemos en todos los niveles. A nivel local hemos tenido el último año una voz propia y hemos demostrado que tenemos una capacidad suficiente. La gente me conoce, sabe la trayectoria que he tenido y que he estado peleando. Estoy dentro de un proyecto que nos fortalece aún más. La gran diferencia con Imagina es que hemos demostrado una oposición dura con el PP y a la vez constructiva.

Habla mucho de conformar un bloque alternativo a la derecha. Ocurre que las perspectivas para el PSOE son buenas, pero para Podemos no son las que tuvo Imagina.

Yo creo que los números pueden dar. En abril hubo un voto de futuro y progreso frente a las derechas. Con el trabajo que hemos hecho y la memoria de la gente podemos hacerlo. De la Rosa no ha sido sincero acerca de con quién quiere pactar, sólo busca números. Es momento de ser sincero con la ciudadanía y decir con quién vas a pactar y con quién no, y nosotros decimos claro que no vamos a pactar con ningún partido de la derecha. Por tanto, el cambio somos nosotros.

¿Y si no suman?

Aportaremos y azotaremos.

Si ese gobierno de izquierdas es posible, ¿cuál será la primera medida a adoptar?

Las primeras fases son tres. Hay que abrir los cajones y disipar cualquier síntoma de corrupción. Hay que crear un plan de empleo digno, con un plan verde que permita la transición energética para generar un nicho de trabajo. La tercera cuestión es poner un Ayuntamiento en morado, pensado en el feminismo y la igualdad. Eso marcaría un cambio básico para el resto del mandato.

Inciden, y no sólo ustedes, en el empleo, pero el Ayuntamiento no tiene competencia alguna en esta materia...

Y tienes toda la razón. Yo no abogo, como sí hacen otros, por crear un servicio de empleo porque eso, al final, es engordar la maquinaria municipal. Sí creo en generar herramientas para crear empleo. ¿Cómo? A través de las contratas municipales, dividirlas en lotes, apostar por las pymes innovadoras y de la ciudad; dando ayudas a la rehabilitación de viviendas... Y hay que buscar nuevas empresas, eso es fundamental.

Llevaron al Tribunal de Cuentas las dietas del secretario y el interventor y han denunciado ‘dedazos’ en ciertas adjudicaciones. ¿Existe una red clientelar a desactivar dentro del Ayuntamiento?

Sí. El caso de las dietas creemos que es para tener dóciles a los habilitados nacionales, algo que es muy grave y que ha mantenido Lacalle. Hemos denunciado que en la gestión de residuos de construcción hay un conglomerado clientelar en el que se favorece a una empresa vinculada con el PP. Incluso hemos denunciado que cada año se destinan 150.000 euros para pagar sueldos a gente vinculada con ellos, que es el caso del CEEI. Desactivar esto es volver a la normalidad democrática y que cualquier empresa de Burgos pueda concurrir a las licitaciones, favorecer a las pymes y volver a un Ayuntamiento transparente.

Han propuesto convertir El Silo en un centro para jóvenes y mayores. Al margen de ese proyecto, ¿tiene algún plan para Gamonal?

Al igual que en el resto de la ciudad, hay que apostar por el comercio local, y para eso hay que dar microcréditos para modernizarlo y poner a disposición de los emprendedores locales en los sitios estratégicos. Hay que revertir la tendencia del PP de convertir los locales comerciales en salas de juego. El Silo es un ejemplo de lo que haríamos en un barrio. En Gamonal y Capiscol las familias se van porque encuentran en otros barrios lo que no tienen allí, así que hay que compensarlo con dotaciones. El debate ahora no es quién pone la baldosa más grande. El bulevar de calle Vitoria lo están planteando el PP y el PSOE. Nuestra prioridad son las dotaciones.

Usted apoyó los disturbios de Gamonal. ¿Satisfecho de lo que ve en la calle Vitoria?

No estoy satisfecho de que se haya sancionado a Gamonal. La inversión en el Silo es necesaria, la ampliación y remodelación de la Gonzalo de Berceo, también. Dinamizar el antiguo pueblo con viveros y equipamientos, también. La lógica del párking en la calle Vitoria fracasa porque si un piso allí vale en torno a 77.000 euros...

Es que eso no es verdad. En la calle Vitoria valen más del doble.
Bueno, pues rectifico. Hay que buscar soluciones baratas al aparcamiento. Al lado del pueblo antiguo hay un solar destinado a viviendas. Es factible convertirlo en una zona dotacional y hacer aparcamiento en altura. No es lo mismo pagar 8.000 o 9.000 euros en altura que 25.000 en un subterráneo.

¿Y ese solar es público o piensan socializarlo?

No es público, pero tengo la certeza de que a quien quiere desarrollarlo le puede interesar la posibilidad de venderlo al Ayuntamiento.

Díganos por qué sería bueno que usted sea alcalde.

La gente me conoce y sabe cómo he peleado en el Ayuntamiento. Somos la única alternativa del cambio, entendemos que somos el voto útil, lo hemos demostrado y tenemos que decir que queremos avanzar, y eso significa votar a Podemos.