José María Chomón

Bailando bajo el diluvio

José María Chomón


Periodismo capitalino

02/06/2022

Me ha llamado la atención que el fallecimiento del empresario José Antolín no haya sido referenciado con mayor despliegue por los grandes grupos mediáticos nacionales. Estoy casi seguro de que esto no hubiera sucedido si José Antolín y su familia hubieran trasladado a la capital del reino su grupo empresarial. Es uno de los males del periodismo y uno de los defectos que tenemos los periodistas. Tendemos a destacar lo más cercano, ignorando, muchas veces por lejanía, dejadez y desconocimiento, otros acontecimientos. El periodismo capitalino, como lo califica con sorna el periodista de la COPE Víctor Fernández, nos empacha con los Galán, Ayuso, Aragonés, Florentino…, o con las estrellas de la salsa rosa. Es el mismo periodismo capitalino que se retoza con un macabro suceso ocurrido en una pequeña provincia, o despide con una breve referencia, y en algunos casos ni eso, a personas que han sido capaces de convertir un humilde taller en una multinacional que emplea a decenas de miles de personas en todo el mundo. Este egocentrismo periodístico, que solo piensa en datos de audiencia, es la razón y causa por la que el futuro de un tal Mbappé es infinitamente más trascendental que los avances conseguidos por un grupo de investigadores para luchar contra el cáncer de pulmón. El centralismo periodístico es el reflejo del control económico, político y cultural sobre los medios, y la consecuencia de la centralización política y económica que provoca la concentración geográfica de los grandes grupos mediáticos. Existe a gran escala, con Madrid o Barcelona; y también en ámbitos inferiores, como en las capitales autonómicas. 

Los grandes grupos mediáticos ofrecen una visión distorsionada de los territorios y tienen una gran capacidad de olvido. En su lucha suicida por la audiencia no son pocas las ocasiones en las que se comportan como las moscas: donde acude una… Y esto sucede porque el centralismo periodístico es proporcional al centralismo de las noticias y a la rutinización de los modelos de trabajo periodísticos.