El regreso de Quill, la roedora protagonista de Moss, a las gafas de realidad virtual de PlayStation 4 (PSVR) ha concitado una opinión favorable en todos los expertos en realidad virtual, como ya lo hizo el primer juego. Esta tecnología se propone hacer creer al jugador que está presente en un mundo creado por ordenador y Polyarc lo logra convirtiendo al jugador en actor privilegiado que puede posibilitar con su intervención el camino de la protagonista para superar puzles, ayudarla a combatir, frenar a los enemigos o curarla. El jugador es espectador pero es clave para la historia, por lo que se siente conectado con Moss y su búsqueda de unas reliquias, consiguiendo más sensación de presencia que otros juegos que lo sitúan en el centro de la acción.