Agentes de la Policía Local intervinieron el pasado domingo, 12 de marzo, en Burgos un arma prohibida de electroshock, comúnmente conocida como táser, que portaba un joven de 21 años.

Los hechos ocurrieron pocos minutos antes de las diez de la mañana, cuando un ciudadano observó, entre un grupo de jóvenes, cómo uno de ellos esgrimía lo que a su juicio parecía una táser. En su llamada al 112 aportó las características del joven que, junto a otros cuatro chicos y dos chicas, se encontraba a la altura de la calle Vitoria, cerca del polígono industrial.

Varias dotaciones de Distrito y de Protección Ciudadana de la Policía Local se personaron en el lugar, donde encontraron a los siete jóvenes en actitud tranquila. Ya que en el grupo se encontraban dos mujeres se solicitó también la presencia de una componente femenina, adscrita a la nueva sección de Distritos y que procedió a realizar un registro de las pertenencias de las jóvenes. También acudieron al lugar agentes de la Unidad Canina que, gracias al perro detector de drogas, localizaron cierta cantidad de hachís, destinada al autoconsumo, a un joven de 18 años. Tras ser intervenida dicha sustancia se tramitó acta de infracción por tenencia de estupefacientes.

Finalizados los registros, no se localizó la citada arma prohibida, pero los agentes supusieron que, al ser advertida la presencia policial por los jóvenes, el arma bien podría encontrarse abandonada por las inmediaciones.

Por ello, los agentes rastrearon la zona y localizaron bajo un vehículo estacionado muy próximo al lugar donde se encontraban los jóvenes una funda negra en cuyo interior se localizaba la citada táser.

Preguntados por la propiedad del arma, uno de los jóvenes manifestó de manera voluntaria que era suya. Los agentes de la Policía Local procedieron a su intervención comunicándole las consecuencias que se derivan de portar ese objeto, siendo a su vez informado de la tramitación de la correspondiente acta de infracción.