«Queremos que nadie se sienta desatendido en el medio rural"

I. Pascual-F. Trespaderne
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Entrevista al presidente de la Diputación, César Rico

«Queremos que nadie se sienta desatendido en el medio rural" - Foto: Luis López Araico

César Rico, tras perder el PP la mayoría absoluta, afronta su tercera legislatura al frente de la institución provincial con un socio de gobierno, Ciudadanos, que no se lo puso nada fácil en la negociación y logró el ‘control’ de algunas de la áreas más importantes de la Diputación, como son las de Personal, Planes Provinciales y la presidencia de la Sociedad para el Desarrollo de la Provincia de Burgos (Sodebur). En las últimas semanas se ha registrado la primera grieta o fisura entre PP y Cs, y ambos grupos tratan de minimizar los efectos y reconducir esa situación.
¿Qué valoración hace de estos seis meses de gobierno con Cs?

En primer lugar se ha visto la capacidad de negociación de los dos grupos, tanto de Ciudadanos como del Partido Popular, para hacer un equipo de gobierno fuerte. Es la primera vez que el PP llega a un consenso con otro grupo para obtener la mayoría absoluta y se alcanzó con sesenta y seis medidas, o acuerdos, que a lo largo de la legislatura tendremos que ir cumpliendo. Hemos empezado bien, cada uno con sus responsabilidades, con alguna discrepancia en los últimos días, y vamos a ver como evoluciona en lo sucesivo. Cuando cumplamos el año del pacto haremos balance del ejercicio.

De esas 66 medidas acordadas con Cs, ¿cuántas están en marcha?

Hay algunas muy interesantes, como ir subiendo de forma paulatina la financiación de los Planes Provinciales, que han pasado de 16 a 19 millones de euros en el caso de los municipios, y de 4 a 5 en el de las entidades locales menores;también hemos dirimido qué día es el de la fiesta de la provincia y a qué localidad va, dando alternancia a los diferentes grupos políticos, y se ha incrementado el plan de empleo para personas discapacitadas, como también venía en el acuerdo con Cs... creo que vamos poco a poco, pero cumpliendo los objetivos.

¿Se encuentran cómodos en ese pacto cuando han estado acostumbrados a gobernar en solitario?

Sí. En toda relación cuesta ir engrasando la maquinaria, pero por la parte que corresponde al Grupo Popular creo que estamos cómodos, aunque es verdad que en algunos casos o materias nos hace falta mayor coordinación y espero que poco a poco vayamos limando algunos aspectos de la convivencia diaria para evitar malos entendidos.

¿Han existido discrepancias en el diseño de los Planes Provinciales por la agrupación de convocatorias y nuevos indicadores de reparto?

No porque ese porcentaje de la presión fiscal es muy residual, de un diez por ciento del total, y es verdad que en la anterior legislatura ya estudiamos unificar las subvenciones a los ayuntamientos con el fin de que no estén permanentemente rellenado papeles para que lleguen a la Diputación, que en los departamentos no se acumulen quinientos expedientes para luego conceder subvenciones que en muchos casos cuesta más la tramitación que la ayuda que se da. Además, de esta forma damos más autonomía municipal, que el ayuntamiento se lo gaste en lo que estime que sus vecinos quieren, con ese límite del 30% para gasto corriente de la cantidad resultante final. Hacemos un favor a los ayuntamientos no dándoles tanta tramitación burocrática.

¿No temen que se pierda el objetivo de algunas de esas convocatoria que se han integrado en planes, como por ejemplo la de cultura y fiestas?

Eso no depende de la Diputación, dependerá de los objetivos que se marque cada corporación, pero creo que no van a desaparecer y posiblemente se incremente la capacidad cultural de los ayuntamientos porque ahora van a ver que tienen una mayor capacidad de gasto corriente para cultura que no en una inversión que igual no necesitan.

¿El pacto de gobierno ha roto las vías de diálogo con la oposición, en especial con el Grupo Socialista?

No, las relaciones son buenas y hay que reconocer que es el grupo mayoritario con el que tenemos que tener una normal convivencia. Hay un buen clima dentro de la crítica que lógicamente debe hacer la oposición para mejorar la acción del gobierno.

Pero este año no han realizado ninguna aportación a los presupuestos y se han quejado de que les han dado poco tiempo para hacerlo...

Alguna excusa tenían que poner. Antes siempre ponían la de suprimir la Vuelta Ciclista a Burgos, porque sabían que les íbamos a decir que no, y ahora el tiempo, cuando el 13 de noviembre se le entregó el documento del presupuesto... creo que han tenido más de un día porque aunque sean festivos los políticos nos tenemos que acostumbrar a trabajar. Simplemente estimaron que no era conveniente presentar alguna alternativa por si acaso se la estimábamos.

¿Cómo valora la entrada de Vox?

Lleva dos proposiciones interesantes, aunque tal vez debiera concretar más, pero la última, aunque muy genérica, recoge la realidad y es un poco una carta a los Reyes Magos. Las relaciones son buenas.

Los presupuestos que han aprobado, ¿son lo que hubieran presentado el PP con una mayoría absoluta?

Posiblemente hubieran sido exactamente igual, aunque con los presupuestos tenemos que tener esta legislatura la capacidad de ir planteándolos en función de las necesidades de la provincia y hace unos días con el consejero de Fomento y Medio Ambiente analizamos alguna vía nueva que habrá que explorar a lo largo de estos cuatro años y tenemos que ser conscientes que el presupuesto de 2020 no es el mismo que para 2021, pero en líneas generales hay que ser consciente de que tampoco hay mucho margen para buscar ideas nuevas en un presupuesto de 110 millones de los cuales 35 son para el capítulo de Personal y otros tantos para gasto corriente. Puedes poner un millón más o menos en función de si te endeudas más o menos, pero la idea evidentemente es endeudarse lo menos posible como en la anterior legislatura.

Para la construcción con la Junta de las 32 depuradoras en municipios de 500 a 2.000 habitantes no hay partida en los presupuestos...

Habrá que suplementarla, aunque ese capítulo entra dentro del concepto de lo que es un plan provincial porque los municipios más pequeños piden para lo que es la depuración de aguas. Lo que es cierto es que este presidente ha fijado en muchas intervenciones que esta legislatura será la de la depuración de aguas residuales.

También tendrán que aportar más dinero para llevar la banda ancha, mínimo 30 megas, a los pueblos...

Sí, ya tenemos consignados 500.00 euros y en los dos próximos años tendremos que aportar un millón más, aunque no soy muy optimista porque desde que se saca una convocatoria pública hasta que las operadoras reciben el dinero y empiezan las obras correspondientes pasa mucho tiempo y creo que nos vamos a ir más allá de 2021. Vamos a dar un paso para tener la provincia preparada en nuevas tecnologías y la gente pueda venir, no a jugar si no a emprender y tenga capacidad de estar en el mundo.

¿Qué planes tiene la Diputación para que la provincia salga de la que se dice España vaciada?

No me gusta el término ‘España vaciada’, me gusta más el de la ‘España de las oportunidades’. Recientemente hemos visto la oportunidad que se va a plantear en el municipio de Villahoz, con implementaciones de empresas e industria tecnológica, creo que Burgos tiene muchas oportunidades. Además, de la Diputación, en colaboración con la Junta, estamos llevando a cabo acciones que se engloban en conceptos sociales, que ayudan al reto poblacional, como es el servicio de ayuda a domicilio, al que destinamos 4,8 millones, para tratar a la persona en el territorio y no se tenga que trasladar. Lo mismo ocurre con el Programa Crecemos para conciliar la vida familiar y laboral. Esta son políticas activas contra la despoblación lo mismo que los créditos de Sodebur para generar empleo. Se hacen cosas, pero hay que hacer más y el Gobierno de la nación tiene encima de la mesa las 79 medidas que ha planteado la Federación Española de Municipios y Provincias en las que se atribuyen responsabilidades a todas las administraciones.

De poco sirven estas medidas si luego hay una nueva política sanitaria que puede suponer el cierre de consultorios. Hay que llevar servicios, pero no quitar los que se prestan...

La consejera de Sanidad me aseguró que no se va a quitar ni un solo consultorio médico. En lo que estamos de acuerdo es en que hay que racionalizar el servicio médico que se presta en los consultorios rurales, lo que no debe suponer perder ni un milímetro en calidad asistencial. Hay que lograr que nadie se sienta desatendido en el medio rural y garantizar la prestación de servicios.

Otro servicio que hay que mejorar en el medio rural es el de extinción de incendios, ¿se han dado pasos para crear un consorcio provincial?

Es necesario, se lo comenté al consejero y no es la primera vez que lo digo, que la Junta armonice el modelo de parques de bomberos que necesitamos en esta Comunidad y no que cada provincia se busque la ‘vida’. Estamos dando pasos y en la RPT de la Diputación está previsto que se incorporen dos bomberos profesionales y he dado instrucciones al secretario general para que vea la posibilidad de crear un consorcio provincial en el que estén, voluntariamente implicados, los ayuntamientos que quieran. No seríamos los primeros porque creo recordar que hay 29 consorcios provinciales de bomberos en los que participan todos, funcionan bien y permiten más capacidad de financiación. Podríamos buscar una fórmula parecida al consorcio de residuos, que funciona bien. Pero los parques de bomberos voluntarios siempre.

Clunia es otro asunto pendiente desde hace años. ¿Cuándo veremos el nuevo centro de recepción?

En esta legislatura podremos ir a ese centro, pero una obra de esas características, que había cogido velocidad de crucero hasta que se hizo una cata y aparecieron los restos funerarios, hay que parar, hacer un informe nuevo para la comisión de Patrimonio, replantear el proyecto y eso se ha dilatado, pero a lo largo del año que viene cogerá impulso.

El turismo, cada día más, se está convirtiendo en un motor de desarrollo rural ¿qué planes tiene la institución en esta materia?

Son intervenciones de la Diputación y ayuntamientos. Vamos a seguir colaborando con asociaciones, como la de la Ruta del Vino Arlanza. Los ayuntamientos están haciendo muchas cosas y se pueden hacer más, pero en este sector influyen muchos los emprendedores particulares porque son los que generan riqueza en el territorio con sus restaurantes, hoteles, casas rurales y todo tipo de negocios. Entre todos estamos manteniendo un buen nivel de visitantes en el ámbito rural.

¿Qué espera de 2020?

Que Burgos siga creciendo, ofreciendo oportunidades a los emprendedores, jóvenes y mayores, porque esa es la mejor política social que se puede hacer, es decir que las personas tengan capacidad de trabajar y crear una familia en la provincia porque nos irá a todos mucho mejor. También que la situación general española llegue a un convencimiento de sentido común.

¿Cómo afecta a la Diputación que no se haya conformado el Gobierno central?
Afecta a la Diputación y a los ayuntamientos. Desde la Federación Española de Municipios y Provincias estamos planteando, y estaba aceptado, que se modificase y flexibilizase la regla de gasto, la utilización de los superávits y los remanentes de tesorería, pero eso requiere un real decreto de ley que no se puede aprobar estando en funciones y tendremos que esperar al primer trimestre del próximo año, si hay Gobierno y recoge esa sensibilidad unánime de la FEMP.
¿Está preocupado por la situación política del país?
Creo que hay que preocuparse porque pueden venir tiempos complejos en los que se abra una espita de la modificación del Título VIII de la Constitución, que no procede. Otra cosa es que se puedan desarrollar estatutos de autonomía, que es legítimo, que se pueda hablar de más competencias, pero dentro del marco constitucional. Lo que no se puede es poner las palabras ‘conflicto político’ donde no lo hay, hay un conflicto social y de convivencia. Hablar de conflicto político es ceder a un chantaje de los independentistas que a ver hasta donde llega... y es de preocupar porque la convivencia en Cataluña es complicada.
También en el País Vasco se está abriendo otra brecha con el nuevo estatuto y de nuevo se habla de Condado de Treviño.
Espero que también en el País Vasco reine un poco el sentido común porque en un estatuto los grupos que le apoyan pueden poner que hay que modificar la estructura territorial de España para la incorporación de Treviño al País Vasco, pero no deben olvidar, ni el gobierno de España ni el vasco, que nosotros tenemos un estatuto que tiene valor de Ley Orgánica refrendada por el Tribunal Constitucional y que esto no se puede hacer por voluntad de uno. El PSOE tiene que ponerse serio y la solución del Condado de Treviño no es que un estatuto diga que es suyo para anexionarse una parte que en estos momentos toda la legalidad determina que es de Burgos.
¿Las negociaciones con los independentistas cómo pueden afectar al resto?
Espero que todos seamos conscientes del equilibrio territorial porque no solo hay que dar dinero a una determinada comunidad, hay que buscar el equilibrio que nos permita a todos tener un régimen de crecimiento aceptable. Lo mismo que se puede apostar por el Corredor Mediterráneo se debe apostar por el Atlántico.
¿Hay diferencias entre las reivindicaciones de vascos y catalanes o todos buscan más dinero?
En el País Vasco van buscado, evidentemente, mejorar el cupo vasco y en Cataluña unos políticos se han empeñado en movilizar a un determinado sector ciudadano, que no son todos los catalanes, son menos de los que quieren vivir en paz.
¿Está contento con la oposición del presidente nacional de su partido, Casado, en este asunto?
El señor Sánchez se echó en manos de ERC sin preguntar a nadie más si estaba por la labor de echar una mano para que fuera investido. Pablo Casado ha ofrecido pactos puntuales de Estado y creo que Sánchez tendría que haber recogido ese guante porque eso da estabilidad de gobierno y política. Necesitamos un acuerdo, no de gobierno, pero sí sobre las grandes situaciones que tiene que abordar España y Sánchez ha dicho que no.