La agrupación Campturis prevé que durante este fin de semana acudan hasta 800 personas a su concentración motera. La vuelta de este evento repercute directamente en la hostelería mirandesa, que espera «una gran afluencia» y considera la celebración como «una gran oportunidad para promocionar la ciudad». Paralelamente, la ocupación hotelera también confía en un «lleno», especialmente el sábado, día en el que se acerca público de «todas las zonas de España».
Tras dos años de ausencia, «la gente tiene muchas ganas de salir», afirma Francisco Bautista, presidente de la asociación. Pendientes de la meteorología, las actividades se desarrollarán durante el viernes y sábado. La primera jornada «está hecha más para los mirandeses», confirma Bautista, quien añade que «hay que pensar que la gente de la ciudad disfrute de la concentración en su recinto». La reunión no solo va dirigida a moteros de fuera, sino también para todo el conjunto de la ciudad. Respecto al concierto organizado el sábado, «se van a poner autobuses para que se suba al Pabellón Multifuncional y que se baje a la hora que acabe», cuenta el presidente.
No obstante, la cercanía de Miranda con ciudades como Vitoria, Burgos o Logroño hace que «muchos no se hospeden, sino que vengan, den una vuelta, cojan el ambiente y se vuelvan a casa». A pesar de las 150 personas preinscritas, Bautista afirma que «hace dos años vino mucha gente a registrarse presencialmente». Una práctica habitual, pero que «al cambiar el sistema y hacer una comida para los inscritos, hay que calcular aproximadamente la gente que va a venir». Campturis ha organizado para la jornada del viernes «una pequeña degustación de morcillas en colaboración con empresas de Miranda y Las Merindades».
Precisamente, uno de los problemas relativos a esta modalidad de registro previo reside en el «sistema de los bancos». A la hora de hacer el pago de 30 euros, precio de la inscripción completa, «te piden una transferencia de tres o cuatro euros». Esta situación provoca que «si por ejemplo eres de Vitoria, te acerques el viernes o el sábado y te inscribas», explica Bautista. No obstante, las previsiones continúan siendo muy buenas y «es lo que se esperaba».
La asistencia de aquellos moteros que acudan a la ciudad durante el fin de semana, además de todos los mirandeses interesados en el evento, repercute de forma directa en la economía de la ciudad. Sobre todo en la hostelería, ya que «se espera un lleno total el sábado», tal y como afirma Miguel Villar, responsable de marketing del bar Bocca y el restaurante Carbón. Un pensamiento en el que coincide Daniel Nunes, propietario de La Madre y uno de los organizadores de la propia concentración. Según Nunes, «nos está sorprendiendo que nos llame gente de numerosos puntos geográficos». El hostelero afirma que reciben llamadas de Valladolid, Barcelona, Zaragoza o Galicia.
Las consultas sobre cómo inscribirse se están repitiendo durante las últimas semanas en las redes sociales de la agrupación y «todo viene condicionado por estar los eventos moteros parados», cuenta Nunes. El propio viernes La Madre ha organizado «un concierto especial para la concentración». Además, «se prepararán estacionamientos especiales para las motos», aunque considera que «vendrá gente más local». Será el sábado cuando más afluencia habrá, especialmente «a mediodía en el centro histórico», una «muy buena noticia para la ciudad», explica.
Respecto al bar Bocca, «se ha diseñado un casco decorado o se van a ofrecer bonos de copas», cuenta Villar, quien añade que «ese fin de semana se va a dar una imagen de lo que representa Miranda». Tanto el propio bar como el restaurante Carbón están preparados y «reservas habrá, pero es un tipo de público que decide lo que hacer el mismo día». No obstante, donde si ha habido previsión es en el alojamiento. «Son muy buenas. El sábado esperamos un lleno total», explica Beatriz Cardero, gerente del hotel Tudanca. La vuelta de la concentración motera supone una muy buena noticia para los negocios mirandeses, y «desde el hotel siempre se ha colaborado con la agrupación», concluye la gerente.