Solo el 13% de los contagiados tienen menos de 12 años

G.G.U.
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Desde agosto se han confirmado 654 infecciones en niños, de las cuales cinco en colegios. La Junta decreta la primera cuarentena de este curso, para una clase de Infantil del Zapatito

Los niños suelen ser escrupulosos con el cumplimiento de las medidas preventivas para evitar contagios. - Foto: Valdivielso

De los 5.000 contagios que se han confirmado en la provincia desde el 1 de agosto, 654 se han detectado en niños de 12 o menos años; es decir,  el 13% del total, según datos oficiales de la Junta. La transmisión se sigue produciendo de forma mayoritaria en casa y en el ámbito familiar (43%), mientras que, por ahora, los centros escolares son espacios sin relevancia en este sentido, con solo 5 positivos en los que se ha concluido que el foco de infección era un espacio educativo (0,76%). Ahora bien, sería necesario un período de tiempo más amplio para determinar hasta qué punto hay propagación del virus e infecciones con origen en espacios frecuentados mayoritariamente por personas sin vacuna contra la enfermedad del coronavirus, como son los colegios de Infantil y Primaria. En los de Secundaria hay mayores de 12 años y buena parte de ellos (alrededor del 70%) tiene ya la pauta completa.

De momento, en estas dos primeras semanas de curso, la Junta solo ha puesto en cuarentena una clase en Burgos. Siempre según información oficial, se trata de un aula de Infantil del colegio Nuestra Señora de Lourdes (Zapatito); es decir, de un grupo con consideración de ‘burbuja’ [menores de 6 años que no tienen que llevar mascarilla por obligación ni guardar la distancia interpersonal]. La Junta explicó que se están haciendo pruebas a los compañeros y profesores que hayan tenido contacto con esta clase y subrayó que «las familias que estén pendientes de resultados no deben llevar a los menores al centro escolar hasta que no haya terminado el período de cuarentena».

Es previsible que a medida que avance el curso se incrementen las aulas en aislamiento, aunque con el nuevo protocolo de actuación solo se considerará que una clase está en cuarentena cuando todos los alumnos tengan que quedarse en casa. Si un crío [o más] han pasado la covid en los seis meses previos (180 días) a la confirmación del contagio que obliga a hacer rastreo en el aula, podrá seguir yendo a clase y no se clasificará como aula confinada. Así, aunque ya se han confirmado cinco contagios en menores de 12 años en los que se considera que la transmisión se ha producido en el centro educativo, solo hay una clase en cuarentena.

El 0,7%, hospitalizados. Los datos oficiales de contagios desde agosto, cuando el 70%de los mayores de doce años de la provincia ya estaban vacunados al completo (con las dos dosis), apuntan a que, de momento, el virus se sigue transmitiendo más entre adultos que entre críos. Habrá que esperar unos meses, no obstante, para ver qué variaciones se producen en ese sentido y en qué franjas de edad.
Lo que los datos sí afirman ya con rotundidad es que el riesgo de complicaciones en un menor infectado por SARS-CoV-2 es muy inferior al que presenta un adulto, dado que, siempre según información oficial de la Junta, de los 654 críos que han dado positivo desde agosto, solo cinco necesitaron atención especializada en el hospital. Esto es menos de un 1% (0,7%).

Este factor de riesgo es uno de los que se evalúan a la hora de aprobar una vacuna para un colectivo concreto; es decir, se analiza cuánto beneficio aporta la inoculación de un fármaco en relación al riesgo que conlleva la enfermedad que combate, así como en relación a los efectos adversos del propio fármaco. Para niños de hasta 12 años todavía no hay vacunas contra la covid aprobadas en la Unión Europea, pero sí hay estudios en marcha para ello.

Mientras tanto, la campaña de vacunación continúa para niños de 12 años (cumplidos)en adelante, con unas coberturas muy amplias:78,5% de la población general con dos dosis (y, al menos, un centenar de usuarios de residencias con tres) y un 81,1% con un primer pinchazo puesto. Así, Burgos tiene garantizado que más de ocho de cada diez de sus habitantes se habrán vacunado cuando comience el frío, ya que es de prever que las mismas personas que ya se han puesto una dosis vayan a recibir la segunda.

En Burgos, la cohorte con menor cobertura es la de 20 a 29 años (68,5%), que es en la que más contagios se confirmaron este verano.