Tener una magnífica formación y pertenecer a una 'buena' familia no garantizan la educación. Personas con la suerte de aunar capacidad de aprendizaje y recursos tiran todo por la borda si se manejan sin respeto, cortesía y urbanidad, valores esenciales de la buena educación.
Nació en Burgos el 18 de marzo de 1991, se graduó en Derecho con diploma International Legal Studies (E-1) en la prestigiosa Universidad Pontificia de Comillas (ICADE), donde también realizó un doble Máster de Acceso a la Abogacía y Derecho de Empresas. Ha trabajado en dos despachos internacionales de prestigio, para después incorporarse al bufete fundado por su padre y del que hoy es copropietario.
En junio de este año, declaraba tener más de 153.000 euros en su cuenta en el BBVA; otros 129.000 euros en inversiones; el 20% de una sociedad que lleva los apellidos de su padre, valorado en 169.609 euros; un Range Rover Evoque, y un barquito (Solas III/Q/4), con su derecho de amarre en Puerto Chico (Santander). Tan solo debe 7.600 euros. ¿Cuántos jóvenes de este país pueden presentar esta tarjeta a los 31 años?
Este burgalés con tanto patrimonio formativo y económico se pasea desde febrero por Valladolid con una gallardía impropia de su edad. Lleva poco más de medio año en su puesto de trabajo y acumula tantas broncas con sus 'compañeros' que en condiciones normales no habría superado el periodo de prueba. En tiempo récord ha conseguido gran notoriedad y no por lo que es y hace, sino por lo dice de los demás, por insultar. Se ha convertido en un faltón que muestra un desprecio absoluto por lo que piensan los demás, a los que quiere imponer su credo, porque él es el depositario de la verdad revelada.
Este marinero de bote, que sale de recreo por el Cantábrico como las parejas faenan sin ánimo de pescar, debería echar el amarre ya. Toda su familia, la de apellidos y la política, se lo agradecerá; podrían ver el telediario sin miedo a un corte de digestión.
Les presento a Juan García-Gallardo Frings, procurador de las Cortes de Castilla y León y vicepresidente del gobierno por el tercio de Vox, un partido político en plena implosión. Macarena Olona, amortizada, Javier Ortega Smith, a remojo, y Gallardo, para cuándo. La mala educación está perdiendo utilidad.