Como un mazazo cayó la semana pasada la resolución del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico que daba luz verde a la evaluación de impacto ambiental para uno de los cuatro megaparques eólicos previstos en el entorno de las comarca de Juarros, Demanda y Montes de Oca, concretamente el denominado Alcocero de Mola, que afecta a las localidades de Alcocero de Mola, Arraya de Oca, Cerratón de Juarros, Espinosa del Camino, Valle de Oca y Villafranca Montes de Oca. 

Con otros tres proyectos eólicos sobre la mesa a la espera de su aprobación o rechazo, la Coordinadora Demanda, Montes de Oca y Juarros, constituida hace un par de año por vecinos y representantes municipales de las tres zonas para mostrar su rechazo a este tipo de parques, «con molinos más altos que la Catedral de Burgos» y su instalación en ese entorno, no ha perdido el tiempo y ha organizado para el sábado 4 de marzo una ruta por los parajes de los Juarros en los que se ubicarían los parques Marmica y Fuerga. Se trata de una marcha que tiene dos propósitos, explican desde la coordinadora.

Por una parte, reivindicar un territorio con una biodiversidad extraordinaria, donde destaca uno de los robledales más importantes de la provincia, y por otra, rechazar los eólicos en ese entorno cercano a los yacimientos de Atapuerca.

Además, muchas de las localidades, incluidas las afectadas por  el proyectos aprobado recientemente, están en el Camino de Santiago. La coordinadora denuncia que esos megaparques lo que harán es «convertir el monte en un polígono industrial», cuando lo que se debería hacer es protegerlo de los impactos visuales y la afectación a la fauna que provocan en un territorio que cuenta con los dos patrimonios de la Humanidad mencionados, la ruta jacobea y los yacimientos de Atapuerca. 

La marcha, que durará entre una hora y media y dos, partirá de Salgüero de Juarros a las 11 horas y recorrerá los parajes de bosque autóctonos donde irían las megaturbinas de los parques Marmica y Fuerga, en los términos de Salgüero, Mozoncillo y Arlanzón, principalmente, concretan. 

Respecto al proyecto aprobado de Alcocero de Mola, pese a su oposición, la plataforma reconoce como positivas algunas de las medidas correctoras impuestas por el Ministerio a la promotora, como la eliminación de la línea de molinos entre Arraya de Oca y Cerratón de Juarros, la reubicación de algunos otros por su cercanía a núcleos urbanos o el soterramiento de la línea eléctrica. En todo caso, inciden en que se mantienen los impactos negativos en localidades como Turrientes, Villalmóndar, Villalbos, Villalómez y Mozoncillo de Oca.