La guerra que libran Rusia y Ucrania ha puesto de manifiesto la dependencia energética que Europa, y especialmente los países del centro del continente, tienen del petróleo y del gas natural del gigante euroasiático. A las puertas del invierno y sin visos de que el conflicto tenga una pronta solución, todas las miradas se vuelven ahora hacia las posibles soluciones que permitan no estar subyugados a los productos energéticos rusos.
Una de las alternativas que más está sonando desde hace tiempo es la del hidrógeno. El CEO de la compañía burgalesa Hiperbaric, especializada en la comercialización de compresores de este elemento, defendió ayer su papel máxime en el contexto que se mueve el mundo en estos momentos. «La energía es la forma que tienen de imponernos una determinada forma de vivir», aseguró Andrés Hernando, que vaticinó que de abrazar la economía basada en el hidrógeno «podremos ser mucho más autónomos, independientes y sostenibles». El empresario inauguró el primer encuentro del ciclo Lunes, por fin, que estrenó ayer la Fundación Caja Rural, un espacio en el que pasarán distintos protagonistas de la sociedad y la cultura de Burgos para acercar sus experiencias y conocimientos.
Junto a la libertad que otorgaría a los países no depender de energías como el petróleo y el gas natural, Hernando recordó el fuerte impacto en materia de emisión de gases de efecto invernadero que se ahorraría el planeta. «Nos permitirá dejar de consumir combustibles fósiles. El sol nos ayuda a producir energía eléctrica, generando hidrógeno que a su vez se emplea para almacenar esa energía», explicó el CEO de Hiperbaric.
España, aseguró, puede llegar a producir hidrógeno de manera rentable y eficiente hasta el punto de exportar al resto de naciones del continente. En este sentido, recordó que Burgos tiene muchas papeletas para convertirse en uno de los epicentros nacionales de esta tecnología. «Tenemos sol, viento, espacio y empresas y talento capaces de desarrollar este nuevo concepto», defendió Andrés Hernando. «Tenemos una oportunidad muy grande de entrar en un mundo que va a cambiar la forma de vivir de todo el planeta», insistió (...).
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