Se trata de un sector consolidado pero al que le queda aún mucho recorrido. Es una de las conclusiones de la Jornada de Apicultura que tuvo lugar ayer en Monasterio de la Sierra organizada por el Grupo de Acción Local de la Sierra de la Demanda (Agalsa) y que concitó el interés de un nutrido grupo de personas, que pudieron conocer algunas de las iniciativas más singulares que se están llevando a cabo alrededor de la producción de miel.
«Existen ayudas que están bastante bien para el sector pero quienes somos apicultores en ecológico las echamos de menos. En Castilla y León, al contrario que en otras comunidades, no existen, y se supone que nos tendrían que apoyar desde las administraciones por hacer las cosas mejor», explicó Abel García, uno de los organizadores de la jornada y apicultor en ecológico él mismo, que echa de menos algún tipo de incentivo o premio a quienes apuestan por un trabajo que no deja una huella negativa en la naturaleza y que lo hacen en un momento en el que el cambio climático es tan evidente.
García, de Miel El Castillejo, de Monasterio de la Sierra, explicó su experiencia en las jornadas junto con otros emprendedores rurales como él procedentes de Salamanca, Asturias, Lugo, Zamora, Madrid, Segovia y Toledo que compartieron sus negocios alrededor de la miel en sectores como la cosmética, los regalos u otro tipo de iniciativas como apadrinar una colmena.
Hubo lugar también para un mercadillo, para la cata de mieles e hidromieles o para un paseo «entre cuezos y brezos» en compañía de Teodoro Esteban, un apicultor tradicional de 86 años. El encuentro terminó con la presentación de la web abejaspaisajecultural.org, un inventario popular sobre la arquitectura tradicional apícola para la biodiversidad de la provincia de Burgos que apela al voluntariado y a las colaboraciones para contabilizar y ubicar el mayor número que sea posible de hornilleras y dujos, cuezos u hornillos.
Abejas Paisaje Cultural es una iniciativa de la Fundación Oxígeno, organizadora también de la jornada, que cuenta con el apoyo del Ministerio de Transición Ecológica, la Junta, la Diputación y la Fundación Círculo.