El golpe de la pandemia sacudió duramente a todos los sectores y, también, incluso a aquellas empresas sólidas que están asentadas en sus respectivos mercados, como Aciturri. Eso sí, la firma aeronáutica que posee varias plantas en Miranda ha logrado levantar el vuelo nuevamente y no para de crecer. A principios de octubre lanzó una oferta de empleo para cubrir hasta 40 vacantes y en apenas tres meses, cuando acabó el año, la compañía ya había conseguido cubrir todas esas plazas. Ahora bien, el aumento de la plantilla de esta entidad solo acaba de comenzar y, de hecho, tiene previsto mantener la misma dinámica durante el presente ejercicio.
«Afortunadamente las previsiones que teníamos se cumplieron y continuamos generando empleo y así seguirá siendo durante los próximos meses», explican desde la propia entidad. «Ahora mismo estamos cubriendo las vacantes que tenemos disponibles, pero a largo plazo es difícil dar un número», añaden, antes de aclarar que «la dinámica, eso sí, es una realidad».
En este sentido, aunque todavía no tiene marcado exactamente hasta dónde llegará el crecimiento de su plantilla, Aciturri ya ha abierto un nuevo proceso de selección. En esta ocasión, se trata de un total de 15 plazas que, sobre todo, se centran en el ámbito de «los equipos de producción». Desde la empresa aeronáutica puntualizan que «especialmente en los perfiles de ingeniería y de mano de obra directa».
En cualquiera de los casos, la actual situación de las plantas situadas en Miranda y su entorno sí que está cuantificada. En total, hay más de 450 trabajadores que desarrollan su labor en los centros de Aciturri. Tras la última ampliación de personal, según los datos que trasladó IsabelVallejo, la directora de Personas y Seguridad, a este Diario, en Ircio se superan los 170 empleados, contando la última ampliación de la plantilla. Por su parte, en Bayas agrupan a cerca de 150 individuos y en Berantevilla hay casi 40 trabajadores.
Ante esta situación de crecimiento constante, desde la entidad afincada en Miranda no esconden su satisfacción. Según transmiten, «hemos vuelto a nuestro perfil de empresa generadora de empleo» y, además, sentencian que «es algo que ha venido para quedarse». Eso sí, al mismo tiempo aclaran que no se trata de una realidad fortuita, sino que está «asociado a la recuperación parcial de la carga de trabajo que teníamos previamente a la pandemia».
En este sentido, la covid impactó de forma notable en su facturación. En 2021, Aciturri tuvo un volumen de negocio de 150 millones de euros, lo cual fue un dato 34 millones más bajo que en 2020 y que se situó muy lejos de los 331 millones de 2019. Eso sí, ahora, a la espera de conocerse el cierre de 2022, la entidad está dando pasos para retomar aquellas estadísticas.
El aerotaxi aún debe esperar para echar a volar. Aciturri tiene multitud de proyectos, pero tal vez uno de los más llamativos sea su participación en el aerotaxi eléctrico de Lilium, una firma alemana que espera que en 2025 pueda estar operativo. Por ahora, la marca asentada en Miranda aclara que «todavía está en fase de ingeniería y de diseño». Según dicen, «se está desarrollando, pero hasta que no pase por ese proceso y el producto esté completamente aprobado, y empiece la fabricación, los plazos son muy volubles». Sobre ello, eso sí, adelantan que «depende de los equipos de ingeniería y hasta que sea una producto industrial todavía quedarán unos meses».
Aciturri tiene multitud de proyectos, pero tal vez uno de los más llamativos sea su participación en el aerotaxi eléctrico de Lilium, una firma alemana que espera que en 2025 pueda estar operativo. Por ahora, la marca asentada en Miranda aclara que «todavía está en fase de ingeniería y de diseño». Según dicen, «se está desarrollando, pero hasta que no pase por ese proceso y el producto esté completamente aprobado, y empiece la fabricación, los plazos son muy volubles». Sobre ello, eso sí, adelantan que «depende de los equipos de ingeniería y hasta que sea una producto industrial todavía quedarán unos meses».