El Ayuntamiento de Cardeñadijo ha recepcionado e inscrito a su nombre después de 17 años los tres edificios que levantó la UTE MD Proycon y la Promotora Santa Catalina en suelo cedido por el municipio para ese fin en una permuta que aprobó en 2003 el Consistorio, regido entonces por Alberto Calvo, a cambio de varias fincas rústicas y urbanas en otros planes parciales y unidades de actuación para construir viviendas. Esa permuta fue declarada nula por la Diputación en 2007, pese a que los tres inmuebles ya estaban construidos.

La nueva Corporación que entró tras las elecciones de 2007, encabezada por Daniela Grijalvo, no solo no recepcionó los edificios sino que denunció a Calvo y a tres técnicos por prevaricación y falsedad de documentos públicos, quienes fueron absueltos de los cargos en el juicio que se celebró en 2018. Tras ese proceso y ante la 'incomparecencia' de las empresas, el Ayuntamiento asumió el año pasado por accesión los inmuebles, levantando acta de ocupación al estar construidos en suelo municipal y su inscripción en el catastro.  

Durante todos esos años, los inmuebles han sido objeto de actos vandálicos y del robo de buena parte del material, sobre todo en el polideportivo, por lo que hace unos años se tapiaron las puertas y ventanas de todos. Sin embargo, las cubiertas y la estructura no han sufrido daños de consideración por lo que la inversión para su reforma, con ser importante, puede ser asumida por Cardeñadijo, que además cuenta con financiación externa, 30.000 euros de la Diputación para las obras en el polideportivo, una subvención de los fondos Next Generation de 174.5437 euros para el cambio de alumbrado led, y está pendiente de la resolución de una ayuda para rehabilitación.

Los baños de la que será escuela infantil se adaptarán para esas edades. - Foto: Valdivielso

El primer edificio en el que se intervendrá es el centro de salud que cambiará de uso, ya que a partir de septiembre se trasladará al mismo la escuela infantil. La actual guardería se ha quedado pequeña para las necesidades de la población, ya que de cara al próximo curso contará con 30 niños, y se incorporarán, además, bebés de 0 a 1 años, tras la autorización concedida por la Junta.

El edificio tiene una superficie de 304 metros cuadrados y su distribución interior, con varias y amplísimas salas, cumple con las necesidades del centro infantil, por lo que las obras de adecuación no serán de gran envergadura.

El extenso recibidor se adecuará para instalar las taquillas de los niños y espacio para dejar los carritos e, incluso, se puede adecuar un patio interior donde estar cuando hace mal tiempo. Será necesario adaptar los baños a las necesidades de los pequeños y acomodar alguno de los espacios para cocina y comedor. Además, explica Grijalvo, hay que cambiar el sistema eléctrico ya que ni siquiera en aquel momento cumplía la normativa para el uso en edificio público, sino que todo el cableado está concebido para vivienda. En la fachada trasera se abrirá una puerta para dar salida a un terreno municipal que se mejorará como patio de recreo para el buen tiempo. El presupuesto de esta reforma es de 50.000 euros.

Interior del polideportivo, un ‘mastodóntico’ edificio de 1.800 metros cuadrados, excesivo para la población de Cardeñadijo. - Foto: Valdivielso

El Ayuntamiento también acometerá la reparación del polideportivo, una instalación 'mastodóntica' y sobredimensionada para la localidad. Con una superficie de 1.800 metros cuadrados, su rehabilitación se hará en fases. La primera ya se ha licitado por un precio de 100.00 euros y el plazo para presentar ofertas está abierto hasta el 3 de abril. En esta etapa se reparará toda la carpintería interior y el cerramiento de las ventanas, ya que todo está muy vandalizado. 

El Ayuntamiento tiene intención de actuar en las fachadas para tapar las paredes de ladrillo rojo con algún acabado que aísle y dé otra imagen a ese conjunto de edificios,  así como instalar placas solares en la cubierta del polideportivo y crear una comunidad energética para todos los inmuebles municipales.  

El Consistorio, el más dañado. En cuanto al inmueble que se planteó como casa consistorial, de 993 metros cuadrados, su principal problema está en la cubierta donde se instalaron placas de hormigón que se han descolocado y han hecho presión sobre las paredes reventando los muros del primer piso y agrietando las ventanas, además de desplazar el lucernario. Será necesario desmontar toda esa  planta y hacer una nueva cubierta. 

En todo caso, aún no está claro el uso que se dará a este inmueble, puesto que el pueblo no necesita un nuevo Ayuntamiento. La alcaldesa dice que se barajan algunas opciones como un centro cívico, una residencia de ancianos o un centro de día. De momento no hay prisa para definir ese uso ni para su rehabilitación, a la espera de ejecutar las obras de los otros dos edificios, que son más urgentes.