La Audiencia Provincial de Burgos ha estimado el recurso de apelación interpuesto por la defensa del único detenido que sigue encarcelado perteneciente a un grupo criminal que se dedicaba a la trata de mujeres para su explotación sexual en el club Macabucha de Briviesca, contra un auto que acordaba prorrogar por dos años la prisión provisional sin fianza. Determina la libertad provisional previa la presentación de una fianza de 3.000 euros y obliga al detenido a presentarse cada dos semanas ante el juzgado, comunicar cualquier cambio de domicilio y tendrá prohibido salir del territorio español.
El Juzgado de Instrucción número 1 de la capital burebana dictó sentencia contra el hombre que «realizaba labores de portero y era el encargado en ausencia del líder de la banda de imponer a las prostitutas las normas del empleo, obligándolas a trabajar con la imposición de multas en caso contrario y cooperando en su traslado desde el aeropuerto hasta el club de alterne de la localidad».
Hasta en tres ocasiones previas el Órgano denegó la libertad planteada porque «se imputan delitos de trata de seres humanos, explotación sexual, prostitución coactiva, favorecimiento de la inmigración clandestina, delitos contra los derechos de los trabajadores, y además existe el riesgo de que atente contra las testigos protegidas, o sus familias en Colombia. Por ello, el hecho de que efectivamente otros investigados hayan sido puestos en libertad, no implica un trato discriminatorio, puesto que se han tomado en consideración las circunstancias concurrentes en cada supuesto, y el hecho de que tenga domicilio en España no es garantía suficiente para eliminar el riesgo de fuga».
Si bien, según recoge la resolución ante el cuarto recurso presentado, al que ha tenido acceso este periódico, «las circunstancias que inicialmente se tuvieron en cuenta para acordar la prisión provisional, dado que ahora el recurrente lleva más de dos años en prisión (desde el 2 de enero de 2021), y el procedimiento se ha dado por concluido, no pueden obviarse. Está pendiente la causa de remisión a esta Audiencia Provincial para el enjuiciamiento de la causa, lo que supone una aminoración del riesgo de que se sustraiga a la actuación de la Justicia, que en todo caso podrá eliminarse con otra medida de garantía menos gravosa que la prisión provisional acordada, como es la concesión de la libertad. Unido al hecho de que el investigado tiene domicilio familiar en Málaga, se considera la medida más adecuada».
Hechos. La Policía Nacional desarticuló en 2021 una organización criminal que se dedicaba a la trata de mujeres para su explotación sexual. La investigación comenzó en Briviesca, se extendió al norte de Burgos y Cantabria y terminó con cinco detenidos en todo el país y dos víctimas de origen colombiano obligadas a ejercer la prostitución que fueron liberadas.
Una llamada anónima al Servicio de Atención a las Víctimas de Trata de Seres Humanos informando con detalle sobre la existencia de la banda en la capital burebana alertó a los agentes, que iniciaron una investigación y comprobaron como la agrupación captaba mujeres en el país latinoamericano para ser explotadas sexualmente en el club de alterne.
Según los datos que aportó el Cuerpo, los miembros de la banda «empleaban la violencia e intimidación para someter y controlar a las víctimas y las imponían una auténtica servidumbre por deuda». Las mujeres se encontraban controladas constantemente, obligadas a realizar extenuantes jornadas de trabajo donde se veían forzadas a atender a clientes sin descanso, con disponibilidad las 24 horas.