Burgos suma siete días sin muertes por la enfermedad del coronavirus por primera vez desde noviembre. Esta realidad es la mejor evidencia del retroceso de la sexta ola, ya incuestionable en todos los indicadores que se emplean para analizar la evolución de la pandemia a pesar de que el virus sigue circulando y, por tanto, infectando, y a que vuelve a haber estancamiento en la ocupación en hospitales por covid: 28 personas en planta y 5 en la UCI.

En cuanto a lo epidemiológico tampoco hay novedades con respecto a la semana pasada, dado que el cambio en la notificación de casos (los que no provocan síntomas y, si lo hacen, son muy leves) empezó a aplicarse ayer y apenas ha repercutido en los datos de incidencia acumulada. Toda la provincia registraba ayer a 14 días 432 y la capital 552 (siempre por cada cien mil personas). La Junta notificó 409 contagios desde el viernes, que son casi los mismos que en el mismo período de la semana previa, por lo que apenas hay variaciones. Buena parte de estas nuevas infecciones se están detectando en residencias de ancianos, centros de día y otros entornos considerados "vulnerables" en la estrategia nacional de vigilancia de la pandemia, que obliga a notificar todos los contagios confirmados en estos espacios, con independencia de la gravedad.