René Payo

Del Ayer al Hoy

René Payo


Medicina, ayer y hoy

04/10/2022

Está mi admirado colega de academia, José Manuel López Gómez, intentando reconstruir, con un grandísimo acierto, la trascendencia que tuvo la ciudad de Burgos en la historia de la ciencia y de la medicina españolas de los siglos XVI al XX. Sus aportaciones al conocimiento de grandes médicos, que ejercieron su labor clínica en esta ciudad, y de instituciones como el Hospital de la Concepción y el Real Colegio de Cirugía son ya clásicos en nuestra literatura historiográfica, amén de sus brillantes trabajos sobre la farmacia, las crisis epidémicas, la historia de las vacunaciones o el casi oculto papel de las mujeres en las profesiones sanitarias en los tiempos pasados. En su última investigación nos acerca a uno de los más notables médicos hispanos del siglo XVI, el doctor Francisco Díaz, padre de la urología moderna y que tantas vinculaciones tuvo con nuestra ciudad donde desarrolló una importante tarea en la peste de 1565. Ahora se halla profundizando, en un trabajo del que pronto disfrutaremos, en la vida del gran médico y naturalista del Renacimiento Cristóbal de Acosta, muy ligado a Burgos, que fue el lugar en el que vieron la luz algunas de sus más importantes investigaciones sobres sustancias curativas.

No han faltado, como vemos, momentos de especial brillantez en el desarrollo de la actividad médica en esta población y, sin duda, más hubieran sido si no se hubiera dejado pasar de largo esa 'esperanza frustrada' que en palabras de López Gómez fue el Real Colegio de Cirugía, de efímera vida en el tránsito entre el siglo XVIII y XIX. Esas 'luces médicas' de antaño deberían brillar de nuevo ahora que vuelve a surgir la idea de la instalación en nuestra localidad de una Facultad de Medicina. Soy consciente de que los hechos del pasado no pueden convertirse necesariamente en argumentos de autoridad en el presente. Un tema como este debe justificarse en las necesidades y posibilidades actuales. Sobre las primeras no creo que haga falta incidir en demasía, teniendo en cuenta el envejecimiento de las plantillas y el déficit de médicos, sobre todo en algunos ámbitos de especialidad. En relación a las posibilidades podríamos discutir, pero verdaderamente cuando algo se quiere es mucho más fácil conseguirlo como ha ocurrido en Andalucía.