Hace apenas tres meses que se abrió una cuenta en Twitch y en este breve espacio de tiempo Miriam Asensio, una joven burgalesa de 22 años, está consiguiendo prácticamente todos los mimbres para convertirse en una estrella de las competiciones de videojuegos, conocidas como eSports, un espacio hasta ahora absolutamente masculinizado pero en el que las mujeres están empezando a destacar. Tal es así, que prácticamente recién llegada a esa plataforma de vídeo en streaming recibió la propuesta del club Keres Esports (@KeresEsports), el primero de competiciones de videojuegos formado solo por mujeres, para unirse a ellas y convertirse en jugadora profesional. Keres hace referencia a los espíritus femeninos de la muerte violenta en la mitología griega. Toda una declaración de intenciones.
Ser streamer y tener una cuenta en esa famosa red social ha sido para Miriam una evolución natural de su afición a los videojuegos desde que era una niña, pero también una forma de dar rienda suelta a su talento artístico para la música  o para imitar voces. Que sus amigos le animaran a hacerlo fue el impulso definitivo. ¿Y qué es ser streamer? Ella lo explica muy bien: «Una persona que crea contenido en directo en internet. En mi caso la temática es el entretenimiento a través de los videojuegos pero hay contenidos científicos, literarios, de música, periodísticos... de todo tipo. Yo lo que hago es jugar, charlar con la gente y, a veces, imito voces o canto una canción con el ukelele».

(Reportaje completo en la edición en papel de Diario de Burgos de hoy lunes o aquí)