El comercio textil confía en las rebajas para vender el stock

I.E.
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En las dos últimas semanas se ha 'arreglado' el mal inicio de la campaña de compras navideñas

En algunos comercios del centro de la capital ya cuelga el cartel de rebajas. - Foto: Luis López Araico

A priori la llegada de las fiestas de finales de diciembre constituyen una época propicia para las compras, pues en poco tiempo se suceden Papá Noel y los Reyes Magos, el momento del año en el que familias y amigos se hacen más regalos. Pero el comportamiento de los consumidores se torna imprevisible cuando una campaña de bonos al consumo culmina en fechas cercanas a la Navidad. Esta circunstancia, unida a las altas temperaturas del mes pasado, no ha favorecido las ventas hasta bien entrado el mes de diciembre. Hasta el día 23 y 24, «estuvo todo muy parado, con muy pocos clientes en las tiendas», subraya Raúl Martínez, presidente de Centro Burgos, una impresión que comparte su homóloga en Zona G, Victoria Vélez, quien agrega que «hasta después de Navidad la afluencia a los negocios ha sido muy floja».

Los responsables de las zonas comerciales de Burgos creían que esa iba a ser la tónica también a final de año y principio de 2023, pero «no ha sido así». Fue pasar el 25 de diciembre «y empezar el movimiento de verdad», a tal extremo de que Martínez asegura que «a punto han estado de alcanzarse niveles de venta previos a la pandemia». «De los últimos días no nos podemos quejar porque, si no se ha vendido en la línea de la época previa a la covid, casi», subraya el empresario. De la misma opinión es la presidenta de los comerciantes de Gamonal, quien se temía «lo peor» con el mal inicio del mes de diciembre pero quien reconoce «desde el día 25 la cosa está yendo bastante bien». «Yo creo que en seguimos siendo más de los Reyes Magos que de Papá Noel», afirma.

Las benignas temperaturas con que la climatología trató a Burgos durante prácticamente todo el mes de diciembre no animaron precisamente a los ciudadanos a hacer acopio de ropa de abrigo. Martínez advierte de que «ha sido a principio de año, con los primeros fríos, cuando la gente está acudiendo a las tiendas a por plumas y otras prendas, como botas de invierno». Por su parte, Vélez apunta a que muchas personas aprovecharon la campaña de bonos al consumo para hacer ese tipo de compras, «porque en anoraks y cazadoras el ahorro era muy significativo». En todo caso, estos últimos días «están siendo buenos».

Y hoy sábado llegan las rebajas de invierno, aunque algunos comercios, sobre todo en el centro, ya han colgado los carteles con las primeras ofertas. No obstante, el inicio de la campaña de saldos la marcan las grandes cadenas -Zara o Mango- y arrastran al resto de tiendas. En todo caso, Martínez advierte de que las rebajas «están ya un poco desvirtuadas, porque hace tiempo ya que el inicio y final no están tasados por ley y cualquiera puede hacerlas cuando desee».

Por su parte, la presidenta de Zona G considera que siguen siendo un buen reclamo y una época en la que «el comercio puede vender todo el stock de ropa de invierno que tiene en sus almacenes». Pero admite que constituye «una incógnita si van a atraer o no a mucha gente», sobre todo teniendo en cuenta la campaña de bonos al consumo que duró hasta el mes de noviembre. De todas maneras, los comercios de Burgos han tenido que contratar personal para atender la potencial afluencia de ciudadanos a las tiendas en este periodo todavía especial para el comercio.