La idea primigenia era haberlo presentado ante los medios de comunicación como un número especial porque lo es. Pero el 4 de ‘La voz del patio’, que tendría que haber estado en manos de sus lectores de dentro y fuera del centro penitenciario de Burgos alrededor del 8 de marzo, se vio engullido, como tantos otros proyectos, por la crisis sanitaria en la que aún estamos inmersos. Debido al confinamiento del país, los ejemplares solo han podido llegar a los internos y al personal de la prisión y han faltado a su cita con sus otros puntos de exposición: bibliotecas, centros cívicos, ceas, oficinas de La Caixa y centros de la Fundación Caja de Burgos, las dos entidades que sustenta este proyecto periodístico elaborado por un grupo de presos participantes en un taller sobre prensa escrita. 

La singularidad de este trabajo, que se puede visitar online en www.lavozdelpatio.es, reside en que la mayor parte de su contenido se ha centrado en las mujeres y el mundo penitenciario. Así, la entrevista central está dedicada a Manuela Carmena, que fue durante muchos años jueza de vigilancia penitenciaria y conoce bien ese mundo, sobre el que siempre ha tenido una visión muy progresista y centrada en la persona. El encuentro con la exalcaldesa de Madrid se produjo durante una salida terapéutica (nombre que reciben las actividades que los internos que cumplen una serie de condiciones pueden realizar en la calle) y fue muy gratificante para los internos, algunos de los cuales llevaban hasta siete años sin salir. Una radiografía sobre las presas en España, que sufren, como el resto de las mujeres, las inercias de una institución machista como lo es la sociedad en la que se incardina; un reportaje con la fiscal de violencia de género, María Boado, y la fiscal superior del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, Lourdes Rodríguez; otro con las trabajadoras del centro de Burgos y un artículo sobre un grupo de teatro nacido en la antigua cárcel femenina de Yeserías y que ha llegado a conseguir un premio Max, ponen el foco en las diferentes realidades penitenciarias de las mujeres. El número se completa con una tira del prestigioso viñetista Paco Roca (premio Goya por Arrugas) y una entrevista a la veterana voluntaria de prisión Chus Klett.

Este número ha sido elaborado en las instalaciones del Centro Penitenciario de Burgos y por los propios internos, que han trabajado de forma inclusiva con un equipo de profesionales de la comunicación formado por periodistas y diseñadores gráficos. Con tal propósito se habilitó y equipó a comienzos de 2019 un espacio en la prisión donde ha quedado instalada de forma permanente la redacción de La Voz del Patio.

El objetivo del periódico es  "servir de vehículo para la mejora de habilidades de los internos y como refuerzo de valores  para su futura integración social y laboral", según explican desde Fundación Caja de Burgos y Obra Social ‘La Caixa’, que insisten en que esta iniciativa, pionera en el ámbito de las Instituciones Penitenciarias, pretende además "ser un proyecto integrador entre todos los actores del sistema penitenciario español y generar una imagen real, creíble y positiva de un segmento de la población con una escasa visibilidad".