Llegó a España, vía Bilbao, el pasado 19 de marzo por la noche. Diego Rico ha aprovechado el forzoso parón competitivo de la Premier para compartir estos días con su familia, a la que reconoce que echa de menos en Bournemouth. Los suyos hacen que el confinamiento sea "más ameno" y señala que mientras él estuvo en Inglaterra, las restricciones allí prácticamente no existían. En principio, debe regresar a Gran Bretaña el 6 de abril para iniciar los entrenamientos, aunque no descarta que su estancia en Burgos se alargue, ya que no está claro que la liga inglesa se pueda reanudar el próximo 30 de abril. 

¿Cómo dejó la situación en Bournemouth?
Hasta el día que yo me vine a Burgos se seguía haciendo vida normal, pero creo que como no tomen medidas corren el riesgo de estar peor que España e Italia. Las restricciones no tienen nada que ver con las que hay aquí en estos momentos. Creo que les llevamos unas semanas de ventaja.

¿El viaje fue complicado?
Todo fue muy normal hasta que llegué a Bilbao. Cogí el avión sin problemas y fue todo como habitualmente. El lío fue cuando aterricé en España, ya que no tenía forma de venir a Burgos y al final hice el viaje hasta mi casa en un taxi.

Diego Rico celebra un gol esta temporada junto a sus compañeros del Bournemouth. - Foto: @afcbournemouth

En principio en Inglaterra no se juega hasta el 30 de abril.
Esa fue la decisión que se tomó allí antes de que me marchara, aunque se está hablando de que el parón puede ser más largo. Estamos todos pendientes para ver qué va ocurriendo. En realidad no se sabe qué va a pasar.

¿Cuándo inician los entrenamientos?
Tengo que estar allí el 6 de abril, ya que está previsto que regresemos al trabajo. Lo que no sabemos es si eso se va a mantener o se va a alargar. Me irán diciendo. He hablado con el club y les he dicho que me avisen en cuanto puedan para poder organizarme, ya que aquí la situación se está poniendo complicada para viajar. Ellos también son conscientes de las circunstancias que se viven en España.

¿Cómo llevas el confinamiento en Burgos?
Estoy con mis padres y mi hermano. En familia se hace más ameno.

Disfrutando con los suyos, que supongo les echará de menos en Inglaterra.
Sí. Antes iban a verme de vez en cuando, pero ahora mi padre está de baja y no pueden desplazarse. He aprovechado este permiso para poder estar con ellos.

¿Ha venido a Burgos con deberes físicos?
Sí, como todo el mundo. El objetivo es no perder la forma, pero siempre algo se pierde. No entrenas al mismo ritmo y eso se nota.

Le llega el parón en una temporada en la que había dado un paso adelante.
Estaba contento porque estaba teniendo más continuidad que la pasada campaña y estaba bastante mejor.

¿Ha notado el año de experiencia tanto en el fútbol inglés como en el país?
La verdad que se nota. He tenido que adaptarme a una competición diferente y al principio se hace complicado. Aunque todo es ponerse y avanzar lo más rápido posible.

¿La adaptación ha sido más dura en el ámbito futbolístico o en el personal?
Todo un poco. La vida, el clima... allí todo es diferente. En el primer año fue cuando más lo noté porque todo era nuevo.

[La entrevista completa, en la edición impresa de Diario de Burgos de este lunes o aquí]