No fue un asalto casual. Los ladrones conocían muy bien el local y sabían dónde guardaban los responsables del negocio el dinero de la recaudación del fin de semana.  A eso de las 3 de la madrugada del domingo al lunes, dos individuos ataviados con gorras y ropa con la que ocultaban sus rostros forzaron la puerta de entrada del restaurante Hammmbur, ubicado en la calle San Lorenzo, y accedieron directamente al almacén, de donde sustrajeron 5.000 euros.

El robo quedó registrado por las cámaras de videovigilancia del local y las imágenes ya están en manos de la Policía Nacional, que ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos. Los primeros indicios, según fuentes consultadas por este periódico, señalan que los autores podrían estar o haber estado relacionados con el negocio. De hecho, tal y como reconoce el dueño, Alberto Miguel, en las grabaciones se puede apreciar cómo se olvidaron completamente de la caja registradora, un lugar al que se dirigen habitualmente los malhechores en este tipo de asaltos, y se fueron directamente al escondite en el que solían dejar el dinero. «A lo mejor fuimos algo descuidados, pero los responsables sabían que en la caja solo había monedas», puntualiza.

 La Policía recabará datos entre los trabajadores y antiguos empleados y también controlará las cámaras de negocios y establecimientos cercanos para conocer la identidad de los dos ladrones que consiguieron tan cuantioso botín.