Dos meses después, regresa el mercadillo semanal en Aranda de Duero este sábado, en su ubicación habitual de la plaza de la Hispanidad. El Ayuntamiento arandino aprovecha las medidas de alivio de la fase 0 en la que todavía está la ciudad y ha organizado las medidas necesarias para que los vendedores ambulantes de productos alimenticios y primera necesidad, así como plantas y semillas, puedan volver a colocar sus puestos, con una serie de condicionantes reflejados en un decreto firmado por la alcaldesa, Raquel González esta semana.

La apertura será en horario de 9 a 14 horas y solo habrá 24 puestos disponibles, lo que corresponde a la limitación del 25% de los habituales, que estarán situados de manera lineal, con una distancia frontal de seis metros y lateral de cuatro, con apertura todos a la avenida Castilla. Para regular el tránsito entre puestos de los compradores, se va a habilitar una zona de entrada por la zona de la glorieta Rosales y otra de salida por la avenida Castilla, marcándose además un itinerario de circulación para los clientes. También se controlará el aforo por personal municipal, que tendrá que ser un tercio del habitual, y, de superarse, los clientes tendrán que esperar para entrar guardando la distancia de seguridad y en orden, no pudiendo manipular los productos a la venta.

En el caso de los vendedores ambulantes, tendrán que poner a disposición de los clientes otras medidas higiénicas como gel hidroalcohólico y papeleras para residuos desechables como pañuelos en cada puesto. Además, los vendedores tendrán que guardar dos metros de distancia entre ellos dentro del mismo puesto, y si el tenderete no lo posibilitara, solo podrá haber un vendedor. Todos ellos tendrán que llevar guantes y mascarilla, junto a evitar manipular de forma simultánea de los alimentos y el dinero. De todas formas, se recomienda que se fomente el pago con tarjeta, extremando la limpieza del TPV después de cada uno.