El UBU Colina Clinic, héroes de leyenda

A.I.A.
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El equipo burgalés, con la permanencia asegurada, luchará el próximo 5 de mayo ante el Ordizia por un puesto en las semifinales de la Liga Heineken

El UBU Colina Clinic, héroes de leyenda - Foto: Patricia González

Lo había intentado en las campañas precedentes pero fue en la anterior cuando el UBUColina Clinic cristalizaba el sueño de la élite. El primer equipo de rugby burgalés había ascendido a la Liga Heineken, con una base cimentada en jugadores burgaleses, un cuadro técnico formado por antiguos jugadores y una directiva en la misma sintonía. Los años de trabajo intenso y en la sombra encontraban su recompensa. 

Se había formado una plantilla compensada y de gran nivel, destacando el fichaje del samoano Talalelei Moli y reforzando algunas líneas; pero su condición de debutante pesaba y el gran reto era no sufrir en exceso y lograr la permanencia.

El UBUColina Clinic daba la primera sorpresa en la jornada inaugural. Recibía en San Amaro, ante una afición entregada que poblaba la nueva grada del recinto deportivo, al poderoso Alcobendas, uno de los grandes favoritos para romper la hegemonía de los equipos vallisoletanos del VRACy El Salvador. Con la formación madrileña llegaba el capitán del XV Nacional, Jaime Nava. Éste no tuvo suerte en San Amaro. Se lesionó.

Por contra, los burgaleses plasmaron un juego brillante, dominando diferentes fases del encuentro, ofreciendo una imagen inmejorable y poniendo contra las cuerdas a los madrileños. Llegaron a comandar el marcador con un esperanzador 23-13. Sin embargo, la falta de experiencia les impidió gestionar los últimos minutos, en los que recibieron dos ensayos que les condenó a la primera derrota (23-25).

Derrota pero una puesta en escena espectacular, dejando constancia de los buenos mimbres que tenía entre sus manos el tándem técnico formado por David Martín y Álvaro González. Destacó el acierto en la patada del apertura internacional Emiliano Calle, que sumó tres golpes de castigo y transformó los ensayos de Jorge Fuente y Santi Salas.

La primera victoria en la Liga Heineken llegó en la segunda jornada. El UBUColina Clinic rendía visita a El Pantano. La Vila se presentaba como un rival asequible pero con el ambiente en contra cualquier resultado era factible. Los castellanos, a pesar de la expulsión temporal del capitán Juan Aristemuño, vencieron por 24-30, con ensayos de Otger Sirvent, Lohan Potgieter y Freginald Africa, unidos a la potente patada de Emiliano Sala.

Con la primera victoria la presumible ansiedad desapareció. El equipo fue adquiriendo experiencia, veteranía y trabajando como un bloque sólido, sin fisuras y, lo que a la larga es más importante, sumando bonus.

Nunca estuvo en zona de descenso, ni siquiera puso en peligro la permanencia. Encajó tres derrotas consecutivas (Hernani, Ordizia y VRACValladolid) pero se mantuvo en la zona templada. Fue un tiempo convulso pero más por los movimientos en la plantilla, que por los resultados.

David Martín y Álvaro González dieron un toque a algunos jugadores, entre ellos a Juandre Kleynhans y abrieron la puerta a Lohan Potgieter.Los dos sudafricanos no pasaron buenos momentos en San Amaro. El zaguero se empleó más en defensa y el tercera línea recaló en el Cáceres. Por contra, se confirmó la llegada del neozelandés Todd Doolan. Tenía una lesión en la rodilla pero se confiaba en la sabiduría del doctor Jacobo Salvat. El facultativo optó por un tratamiento conservador, sin pasar por el quirófano, y los resultados fueron espectaculares. Debutó en menos de un mes frente a la Santboiana.

El UBUColina Clinic transmitía buenas sensaciones, pero éstas rozaron el éxtasis con la victoria ante El Salvador. Los debutantes burgaleses se imponían al todopoderoso SilverStorm por 29-27. Los ensayos de Gavin Van der Berg (2) y Juandre Kleynhans (2) estallaban en San Amaro. Cuatro veces acudieron a la zona de marca, gracias a la fortaleza de la delantera y a la electrizante velocidad del zaguero sudafricano. 

Los burgaleses mantuvieron esta buena dinámica y confirmaron la permanencia. No se resintieron ante la sorpresiva marcha de Emiliano Calle, al rugby inglés. Suplieron su ausencia dando más protagonismo al internacional sub-20 Otger Sirvent.

Logrado el primer objetivo de la campaña soñaron con dar un paso más y mantener la ambición: ¿por qué no soñar con el play off por el título?. Parecía factible pues en varias jornadas habían estado en la zona de privilegio. Con esta buena dinámica afrontaron el tramo final de la campaña. Las lesiones y las convocatorias internacionales bajaron su potencial, aunque el UBUColina Clinic seguía con opciones. Tras ganar a la Santboiana en San Amaro prácticamente lo certificaron. Sin embargo ese encuentro quedará grabado en la memoria de los aficionados burgaleses por otra razón mucho más emotiva: el samoano Talalelei Moli se despedía. Un puntal firme en el eje del equipo abandonaba España por un tema personal. Dedicó la haka a la memoria de su padre y abandonó Burgos entre lágrimas.

El resto de la plantilla sintió su ausencia pero el trabajo ya estaba prácticamente hecho y lo refrendaron en Gernika y ante el Cisneros, conquistando la quinta plaza de la Liga Regular.

Una posición histórica para el UBUColina Clinic, que se ha convertido en el equipo revelación no solo del deporte burgalés sino de la Liga Heineken. Una quinta plaza que le abre las puertas a luchar por el título ante el Ordizia el próximo 5 de mayo. Un partido para soñar y seguir tocando el cielo.