La preocupación de la familia de Luis Miguel Rodrigo crece según pasan los días y se mantiene la ausencia de noticias sobre el paradero de este vecino de Tardajos que desapareció el pasado lunes, 20 de enero, al ir al trabajo, una carnicería del barrio de San Pedro de la Fuente. Después de tres días en los que la Guardia Civil no consiguió hallar ninguna pista, varios allegados decidieron ayer realizar distintas batidas en lugares que suele frecuentar y donde podría haberse marchado. Saben que salió de casa sin dinero y solo con la documentación necesaria. Además, sospechan que no cuenta con mucha gasolina, ya que el día antes repostó unos 20 euros en una estación de servicio de Villalonquéjar, por lo que creen que no pudo llegar muy lejos. Con estas pistas, que conoce la Benemérita, ven clave centrar la búsqueda en el vehículo, un Nissan Xtrail con matrícula 9774-FYX para dar con su paradero.

En la familia aseguran que desconocían que Luis Miguel acumulara deudas con la dueña del local en el que explotaba su negocio desde hace años y se mostraron sorprendidos cuando se enteraron de que el pasado lunes le iban a desahuciar, tal y como informó este periódico ayer. Su situación personal la han ido conociendo a medida que avanzaban los días. Comenzaron entonces a atar cabos que les pudiesen permitir encontrar alguna pista que les ayudase a arrojar algo más de luz. Por ejemplo, saben que sobre las 8 de la mañana llegó en su coche a la carnicería y allí le vieron dos testigos a los que les pidió que le guardaran un aparcamiento mientras daba la vuelta a la manzana. Sin embargo, nunca volvió y esa fue la última vez que le vieron. Sospechan que pudo haber visto algo que le hiciera cambiar de opinión y tomar un rumbo opuesto a su trabajo.

La última vez que su móvil dio señal eran las 8.12 de la mañana del lunes. Algunos familiares solicitaron a la Guardia Civil que rastreasen la señal para facilitar las labores de búsqueda, algo que tiene que autorizar un juzgado. Sin embargo, al tratarse de una desaparición que según creen los investigadores es voluntaria, no puede darse luz verde a esta orden.