Presente y futuro

C.P.
-

Lucía Carrillo y David Carranza han brillado en el Nacional sub'23 con solo 21 años y dentro de una semana se mirarán cara a cara con los 'mayores' en el Campeonato de España absoluto

Lucía Carrillo, oro Sub-23 en los 200 metros del Nacional; y David Carranza, plata en los 800 metros. - Foto: Luis López Araico y Sportmedia

Lucía Carrillo llega puntual al módulo de atletismo de San Amaro. Saca la medalla de su bolsillo y sonríe. Siempre sonríe. Allí se siente como en casa. Pasa horas y horas a lo largo del año entrenando en una pista que por la mañana luce vacía, pero que por la tarde se llena niños y niñas. Algunas no dudan en acercarse a la doble campeona de España sub'23 de 200 metros lisos para pedirle una foto. «A veces vienen y me dicen; 'Quiero ser como tú'. Eso me hace muchísima ilusión».

Esta burgalesa, de tan solo 21 años, es presente y futuro del atletismo español. El año pasado logró la plata absoluta en el 200 y dentro de una semana luchará por otra medalla en el Nacional que se celebra en Madrid. Tal vez no llegue en la mejor forma posible por culpa de una rotura en el isquiotibial hace tres semanas, pero se muestra confiada en sus posibilidades. «No he perdido mucho. Una lesión siempre te descuadra un poco, pero hay que tener cabeza para afrontarlo», señala Carrillo, que reconoce que su recuperación ha sido casi milagrosa.

El objetivo será subirse al podio por segundo año consecutivo y rebajar la marca que realizó el pasado fin de semana en el Nacional sub'23 de Antequera. Su principal rival será una vez más su compañera en el Playas de Castellón Paula Sevilla, máxima candidata al oro. «Esta vez igual se me queda un poquita corta la preparación para el oro, pero es algo que quiero pelear. También te digo que no pienso tanto en las medallas como en superarme a mí misma. Pienso más en marcas que en medallas», cuenta. 

Antes de esa cita, Carrillo afronta este fin de semana el Nacional de Clubes en Ourense, donde competirá en 60 metros lisos. Y es que a la burgalesa le gusta ir carrera a carrera y no pensar mucho en el futuro: «Soy muy ambiciosa, pero no me gusta pensar en el futuro porque pueden pasar muchas cosas. Quiero trabajar cada día y centrarme en la competición que tengo delante».

De momento, su día a día está en Burgos. Aquí es feliz. Acude a diario a entrenar a San Amaro y sigue trabajando con Pedro Movillo, su entrenador de confianza. «Soy atleta las 24 horas. Hay que cuidar la alimentación, los hábitos... todo lo que haces repercute en tu rendimiento», recuerda la burgalesa, que entrena cinco días a la semana, a veces en doble sesión.

A pesar de que el atletismo consume gran parte de su jornada y energía, saca tiempo para estudiar a distancia la carrera de psicología y no le cuesta mucho coordinarse. «Si te organizas bien, no es difícil», comenta.

Por ahora, la fórmula que está empleando le ha llevado al éxito. Ella no se pone más presión que superarse a sí misma, que no es poca cuando se han alcanzado ya metas tan altas. No obstante, el camino no ha hecho sino empezar y en el horizonte se atisban Nacionales, Europeos, Mundiales y, por qué no, Juegos Olímpicos. «Me encanta ir con la selección española. Las compañeras son como una familia. Ser olímpica en París en el relevo 4x100 sería el culmen», concluye Carrillo, que insiste en que la clave de todo es «seguir progresando con los años».

En esa misma línea de continuar creciendo está su paisano David Carranza. «Es ahora cuando empieza de verdad una carrera deportiva», asegura el vigente subcampeón de España sub'23 de 800, que atiende la llamada de Diario de Burgos desde León, donde estudia Ciencias de la Actividad Física y del Deporte.

Allí tiene su vida. Entre la universidad y los entrenamientos trata de hacerse un hueco en una prueba con mucha competencia. En 2022 fue campeón de España sub'23 y en 2023 ha sido subcampeón, pero reconoce que el Nacional absoluto es otra historia:  «El principal objetivo será intentar pasar a la final, ya que igual alguno de los favoritos no entra y puede ser esa tu plaza. Son carreras de campeonatos, son carreras tácticas».

A final de año, una molestia en el aductor le obligó a parar, pero afirma que ya está olvidado, como ha demostrado en los dos últimos campeonatos en los que ha participado. «El mejor entrenamiento es la competición y me ha venido bien competir con gente de nivel para llevar el ritmo de carrera en las piernas», asegura.

Al igual que Carrillo, dedica buena parte de su jornada al atletismo. Entrena seis días y descansa uno, pero también se centra en cuidar detalles «invisibles» como la recuperación, la alimentación, el descanso... y creer en uno mismo. «Si no te lo crees, no sirve para nada. Si la cabeza dice que sí, es que sí. Si vas de que no, al final te perjudica. Es muy importante confiar en uno mismo», destaca.

En el horizonte más cercano está el Nacional de Clubes de este fin de semana, donde defenderá los colores del Fent Cami Mislata, y el absoluto de mediados de febrero, pero echando la vista un poco más allá se presenta el Europeo sub'23 de Helsinki. «Voy a intentar luchar por una medalla», señala Carranza, que cree que los Juegos Olímpicos de París son una quimera porque están demasiado cerca, pero no se descarta para los de Los Ángeles 2028. Lo dicho: presente y futuro.