El 18 de enero de 2021, un trabajador de 62 años de la empresa Semat perdió la vida tras un fatal accidente laboral en la nave de la firma, concesionaria entonces del servicio municipal de limpieza. Lo hizo a causa de traumatismo por el aplastamiento de una máquina que no había pasado la ITV y que, presuntamente, un compañero trató de arrancar con unas pinzas. El Ministerio Fiscal y la acusación particular califican estos hechos de homicidio por imprudencia grave y piden para el empleado que puso en marcha el tractor penas que oscilan entre el año y medio y los cuatro años de cárcel.

Según el relato de ambas acusaciones, todo ocurrió sobre la una de la madrugada de ese día en la nave del servicio ubicada en la calle Merindad de Sotoscueva del polígono de Villalonquéjar. Víctima y acusado debían llevar a cabo tareas de carga de sal en una zona de almacenamiento. Para tal fin, los operarios solían utilizar un tractor de la marca New Holland que en esos momentos se encontraba averiado y estaba siendo reparado por un mecánico. Es por eso que el procesado solicitó al encargado poder utilizar otro transporte más pequeño de la compañía Kubota.

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