Cobo 'recupera' la estrella y Serrano la mantiene

I.L.H.-Ó.C.
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En la gala celebrada anoche en Toledo el chef de la plaza de la Libertad recobró la chaqueta blanca por el restaurante Cobo Estratos y una gastronomía que aúna investigación y vanguardia. El maestro de Miranda proyecta el camino para sumar la segunda

Miguel Cobo 'recupera' la Estrella Michelin para Burgos y Alejandro Serrano la mantiene para Miranda. - Foto: Alberto Rodrigo y Patricia

Lo tenía claro desde que se planteó abrir Cobo Estratos. La parte del restaurante vinculada a la evolución humana nacía mirando a la estrella Michelin, y así lo confesó en marzo de 2020 a este periódico, antes de inaugurar el establecimiento de la plaza de la Libertad. La pandemia retrasó su puesta en marcha, pero ayer recibió su recompensa al escuchar su nombre en la gala celebrada en Toledo y que fue presentada por Berta Collado.

Miguel Cobo recobró la chaqueta blanca que ya le otorgaron hace seis años con su anterior propuesta de negocio y lo hizo por una «cocina de gran nivel, con productos de primera calidad, sabores marcados y notable regularidad en la elaboración de platos», cualidades que se necesitan para obtener este galardón.

«Hemos vuelto», dijo al subirse al escenario y reconocer que sobre su regreso al olimpo gastronómico «no las tenía todas conmigo». Una vez arriba dio las gracias a la Guía Michelin España y Portugal 2023 y dedicó el galardón a su mujer, «mi centro que es mi hija» y a todo su equipo.

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El cocinero mirandés Alejandro Serrano se mantiene en el firmamento de la guía Michelin, la más prestigiosa del mundo de la gastronomía. El chef retiene la estrella para su restaurante y así se comunicó oficialmente en la gala de entrega de premios para España y Portugal celebrada ayer en Toledo. El joven chef admite la satisfacción por renovar el reconocimiento, «en un año en el que nuestra obsesión era asentarnos y hacer nuestro público», admite.

Más allá de cimentar su proyecto, ya trabaja en el que será su nuevo reto, con el que perseguirá completar un nuevo salto en el mundo de los fogones en 2023, con la intención de sumar otra estrella.

Ahí pone de momento su mente, porque tiene claro que «los cocineros que suelen despuntar, hasta alcanzar la segunda, pasan dos o tres años». Sabe que la organización también exigirá más a sus recetas, por lo que necesitará un menú «mucho más sólido y personal». De momento, Alejandro Serrano logró un lugar en la élite con lo que el denominó «el mar de Castilla», un sello que todavía conserva.

(Más información sobre ambos maestros de la cocina, en la edición de papel de hoy de Diario de Burgos)