«No te dejan trabajar para que otros vayan de vacaciones»

R.E.M
-

La prohibición de transitar por la N-I y la AP-1 a vehículos pesados durante la Operación Salida para generar mayor fluidez enfada a los camioneros, parados durante toda la tarde en las áreas de servicio

Jerónimo, Raúl, Antonio y José, transportistas, charlan en el área de servicio de Quintanapalla tras abandonar la carretera y parar su actividad. - Foto: Alberto Rodrigo

Lo que para algunos supone un viaje más en la carretera para irse o regresar de vacaciones, para los transportistas significa un verdadero problema por el hecho de tener que estar retenidos toda la tarde en una estación de servicio sin poder continuar con su actividad laboral solo por ser un día de verano donde aumenta el tráfico. Ayer fue una de esas fechas de la época estival que la DGT había vetado al tráfico pesado por la N-I y AP-1. La mayoría de camioneros reconocía haberse enterado de dicha prohibición en pleno recorrido al ver los paneles en la carretera y, sorprendidos a la vez que enfadados, no les quedaba más remedio que parar y esperar cuatro horas para retomar la ruta.

A las 16 horas empezaba la prohibición y desde esa hora ya se empezaban a acumular camiones en la áreas de servicio. Algunas, como la de Quintanapalla, que destaca por el amplio espacio con el que cuenta y por el lugar en el que se ubica, poco a poco se iban llenando mientras los transportistas formaban corrillos para charlar sobre una situación que no se explicaban. «Es increíble que no te dejen trabajar para que otros se vayan de vacaciones», reconoce Raúl Blanco, que explica que cuando él se va de vacaciones no le importa llegar diez minutos más tarde y entiende que «si hay tráfico, hay tráfico para todos, si estamos en un atasco y vamos a 30 da lo mismo que vaya un camión que un coche, vamos todos a la misma velocidad».

Hasta las 21 horas duraba esta restricción a los transportistas en la N-I desde el kilómetro 249 en Rubena hasta el 336 en La Puebla de Arganzón (sentido creciente), así como también en la AP-1 desde el kilómetro 0 en Castañares hasta el kilómetro 77 en Miranda de Ebro. Un hecho que generaba un gran malestar, puesto que consideraban que cuando llega el momento en el que por fin pueden salir lo hacen todos prácticamente a la vez y eso piensan que acaba resultando incluso mucho más peligroso que si circulan de manera ordenada y sin llegar a acumularse todos en la misma vía. «Eso va a crear más confusión porque cuando paramos, paramos todos», consideraba Pedro, que viajaba desde Portugal y le tocó quedarse toda la tarde. Ponía el ejemplo de que en Italia también se hacía pero evitando que permanezcan tanto tiempo sin poder moverse y las salidas se hacen de forma organizada.

«Ya voy tarde», lamentaba Raúl, que desarrollaba que «sales un domingo de casa, que no has podido hacer casi el descanso semanal, para llegar al cliente y te encuentras esto». Su historia se repetía una y otra vez entre los diferentes camioneros que circulaban ayer.

Jerónimo, Raúl, Antonio y José, portugueses, conversaban junto a sus camiones parados en el área de Quintanapalla y afirmaban que les llamaba la atención que el corte fuese desde ese punto y que, a pesar de las dimensiones que tenía, a las seis de la tarde ya estaba «todo muy ocupado».

En lo que coincidían todos era en que desconocían por completo este veto. Así lo manifestaba, por ejemplo,  Purfilio, que llegaba desde Vigo con dirección a Italia desde el área de servicio de Rubena. Fernando y Pedro, en cambio, se enteraron «por compañeros, la empresa nos decía que estaba abierto y que solo había restricciones en Vitoria, pero no».

Pocos eran quienes en esta ocasión se arriesgaban a la multa y decidían seguir su trayecto sin detenerse. Aseguraban que decidían parar tras ver los paneles indicativos pero no habían encontrado Guardia Civil de Tráfico, aunque sí estaba presente, así como también el helicóptero.