i.p. / burgos
Alberto Martínez de la Iglesia, de 64 años y vecino de Cardeñadijo, perdió ayer la vida hacia las 13,21 horas tras volcar con su vehículo en la carretera BU-100, concretamente en Villafuertes, localidad perteneciente al municipio de Villangómez, al sur de Burgos capital.
El coche en que viajaba la víctima, que no llevaba el cinturón de seguridad puesto, según confirmó la Guardia Civil, circulaba por el kilómetro 11 de la vía cuando, por causas que se investigan, el turismo volcó quedando boca abajo en el asfalto. El punto de la vía donde se produjo el trágico suceso no era especialmente conflictivo, según explicaron algunos testigos.
El servicio de emergencias 112 de Castilla y León recibió varias llamadas de alerta en las que los testigos del siniestro informaban de que una persona había resultado herida, estaba inconsciente y se encontraba atrapada en el interior del vehículo, por lo que tuvieron que acudir al lugar del accidente los Bomberos de Burgos con sus equipos de excarcelación, aunque desafortunadamente no pudieron hacer nada por la víctima, que había muerto en el acto.
Los servicios sanitarios de Sacyl enviaron una UVI móvil, mientras el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil desplazaba varias patrullas para regular el tráfico e investigar las causas del siniestro.
Alberto Martínez regresaba a esa hora a su domicilio desde la localidad de Villahoz, a donde le había trasladado horas antes una conocida para recoger su coche, que permanecía desde hacía unos días en una nave agrícola de esa localidad, propiedad de los Hermanos González, agricultores para los que trabajaba, como para otros tantos de la comarca, la empresa Europaja Díaaz S.L. Y es que el fallecido trabajaba como conductor de camiones en esta empresa y solía dejar su vehículo propio en Villahoz o en otras naves del Monte de la Abadesa cuando estaba con el camión, según explicaba ayer uno de los hermanos González, muy conmocionado por el suceso en el que perdió la vida Alberto Martínez. Además, él mismo se acercó hasta el lugar del accidente, ayudando en las labores de rescate, mostrándose muy afectado por su propia relación con la víctima y con el propietario de la empresa de forraje Europaja Díaz.
Con 65 años, el vecino de Cardeñadijo, que estaba casado y tenía 3 hijos, se iba a jubilar en los próximos meses, según él mismo manifestaba a sus allegados y a los agricultores con los que trabajaba. En los últimos días había comentado su experiencia de camionero y recordaba que el año pasado hizo 267.000 kilómetros.