Dos puntos de oro que colocan al Tubos Aranda en puestos de grupo de ascenso. Los ribereños mantienen su imbatibilidad en el Príncipe de Asturias a costa de un Zarautz que no pudo resistir las embestidas (27-24). Los de Mariano Ortega tuvieron que remontar un ventaja de hasta cinco tantos en la primera mitad. Unos primeros 30 minutos también marcados por la polémica exclusión de Aguirrezabalaga. A la vuelta de vestuarios, los locales arrollaron y se consagraron como claros vencedores.

El duelo arrancó con una superioridad aplastante de los visitantes. Los de Iousu Landa dominaron con puño de hierro y arrollaron a los ribereños durante los primeros veinte minutos. Un dominio reflejado en una diferencia de cinco tantos. Sin embargo, el orgullo amarillo volvió a aparecer cuando más lo necesitaban. Los de Mariano Ortega lograron rehacerse gracias a un parcial de 5-0. Un momento que marcó el devenir del choque. Los locales igualaron la contienda y tan sólo un detalle permitió a los vascos irse por delante al final de los primeros treinta minutos. Una primera mitad marcada por la exclusión de Alberto Aguirrezabalaga, hasta entonces, mejor jugador del partido. Una confrontación con Marcos González, culminó con el vasco fuera de la pista.

La segunda parte terminó de confirmar las buenas sensaciones amarillas. A pesar de irse al descanso un tanto por debajo (13-14), los ribereños remontaron y alcanzaron una ventaja de tres tantos. Una diferencia que no desperdiciarían, y que acabó sirviendo para terminar de rematar a un Zarautz herido tras los contratiempos de la primera mitad.

Un triunfo vital para recuperar la confianza perdida en Burgos. Con esta victoria, los arandinos alcanzan el cuarto puesto y viajarán a Oviedo con el objetivo de afianzarse en la parte alta de la tabla. Dos puntos para seguir soñando.