René Payo

Del Ayer al Hoy

René Payo


Nebrija y Burgos

22/02/2022

Lamentablemente, no está teniendo un gran tratamiento institucional ni mediático el V centenario de la muerte de Antonio de Nebrija (1444-1522), una de las personalidades referenciales en la historia de nuestro idioma. Nebrija era un nombre comúnmente conocido entre aquellos que cursamos la EGB y era incomprensible su desconocimiento cuando nos acercábamos, por primera vez, a los grandes hitos de la cultura hispana. Antonio Onieva lo incluyó en aquel maravilloso libro, en el que tantos mejoramos nuestra lectura, titulado Cien figuras españolas que con gran éxito de difusión publicó la lamentablemente desaparecida editorial burgalesa Hijos de Santiago Rodríguez. Filólogo, traductor, historiador e impresor, entre otras muchas dedicaciones, ha pasado a nuestra historia como autor de la primera gramática castellana editada en 1492, ese Annus Mirabilis en el que tantas cosas cambiaron, o como creador de las primeras reglas de ortografía de nuestro idioma que vieron la luz en 1517.

Burgos puede reclamar su relación con este notable intelectual a través de la impresión en esta ciudad de algunas de sus obras, como sus Introductiones latianae, un tratado filológico que alcanzó un enorme éxito en la Europa del tránsito entre el siglo XV y XVI. Pero quizá el libro más interesante que se publicó en la vieja Cabeza de Castilla de este autor, con pocos ejemplares conservados, fue el titulado Muestra de las Antigüedades de España, que salió de las prensas de Fadrique de Basilea en 1491, cuya imprenta, ubicada frente a la fachada principal de la catedral en la subida a San Nicolás, fue una de las más activas de España en los albores del Renacimiento. Editado con una cuidada tipografía clásica es una magnífica síntesis de los conocimientos filológicos, históricos, geográficos y arqueológicos del autor. No estaría mal que, de una u otra forma, los centros educativos burgaleses dedicaran un especial recuerdo, en este año de su centenario, a la figura de uno de nuestros gigantes culturales y a la reflexión sobre el papel que tuvo la imprenta burgalesa, al filo de 1500, en la difusión de la ciencia, la filología y la nueva literatura que con fuerza se abría camino en un español cada vez más codificado y universal.