Llega la Inteligencia Artificial

G.G.U.
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La primera máquina con esta capacidad se instalará «en meses» en la nueva sala de Rayos de Urgencias. La inversión en tecnología y la renovación de equipos determinarán el futuro del Hospital Universitario de Burgos

El PET-TAC ha sido la última gran inversión en alta tecnología que se ha hecho en el HUBU, alrededor de 4 millones. / j. j. matías - Foto: Jesús J. Matías

Apoyo para el diagnóstico de ocho enfermedades pulmonares y neumotórax. Ese será el cometido del primer equipo con inteligencia artificial que incorporará el HUBU «en meses», según explica el responsable en la materia en la sociedad concesionaria, Javier Puerto. Estará en la sala de Rayos de Urgencias, que va a renovarse «por completo este verano» tras una inversión que ronda los 200.000 euros entre tecnología y obra.

El modelo de gestión del HUBU, concesional, es único en toda Castilla y León y, en principio, tendrá vigencia hasta 2035. Eso significa que, hasta entonces, una empresa privada (Eficanza) es propietaria y responsable del inmueble, así como de todo el contenido del hospital por cuyo uso Sacyl paga un canon anual. En ese importe se supone que está incluida la inversión estimada en renovación de equipos y tecnología, que es lo que va a determinar el devenir del HUBU en el futuro inmediato porque, como reconoce Puerto, «en Medicina, un equipo de diez años se queda bastante al límite». 

Pero una cosa es lo que Sacyl demanda como prestador de la asistencia y otra el tiempo que pasa hasta que se consigue. Prueba de ello son los seis años transcurridos hasta que se instaló el equipo de cirugía robótica -el Da Vinci-, en 2018, o el aparato más avanzado del mercado en detección de tumores, infecciones y algunas afecciones neurológica, el PET-TAC, que se colocó a finales de 2020 y empezó a funcionar en el 2021.

Puerto subraya que en los últimos meses se han actualizado los mamógrafos y los ecógrafos de Radiodiagnóstico, cuyo personal considera que con la demanda que hay, ya sería necesario contar con otra resonancia y otro escáner más. Eso conllevaría una inversión millonaria, por lo que se planifica poco a poco. Aunque los radiólogos apuntan que eso conlleva que, ahora, los aparatos del HUBU están más atrasados que los del resto de España, que ha renovado los de más de 10 años con fondos de la UE.

En Eficanza, no obstante, reiteran que toda tecnología superada en el mercado o necesaria por obsolescencia o uso, se actualiza o se cambia. Ponen de ejemplo los nuevos neuronavegadores de los quirófanos de Neurocirugía y Otorrinolaringología, así como un TAC portátil para los primeros.

Imagen cardíaca. Y en proyecto está la creación de una nueva unidad de Imagen cardíaca. Esta atención se presta ahora en la planta de hospitalización de Cardiología, pero los especialistas llevan tiempo demandando un espacio amplio y específico para esta asistencia; algo que Eficanza afirma que «ya se está planteando» en un espacio libre del sótano menos dos. «El usuario no lo sabe, pero todavía hay metros de reserva, en bruto, para nuevos equipos», afirman fuentes oficiales de la concesionaria, que también se encarga de ejecutar la obra, una vez que llegan todos los permisos.

Tras el traslado, Cardiología ganó la unidad de Rehabilitación cardíaca, que era una demanda muy antigua del servicio.