La inflación desbocada en todo tipo de productos y materias primas que se desató tras la pandemia -y se aceleró con la guerra de Ucrania- ha provocado que la obra de ampliación de la Aduana se encarezca. Los 5,6 millones por los que el consejo de administración de CT Burgos adjudicó los trabajos a una unión temporal de empresas serán finalmente 6,6 tras incrementarse en cerca de un millón.
Hay que recordar que el contrato se asignó con una rebaja sobre el presupuesto inicial de licitación que rondaba el 40%. Un informe jurídico elaborado por el Ayuntamiento dio luz verde a la solicitud elevada por la UTE Herrero Temiño y Asfaltos Uribe, que entregó los trabajos en el plazo establecido. La petición se basa en el mecanismo de revisión de precios excepcional puesto en marcha por el Gobierno para paliar los efectos de la inestabilidad de los materiales en las obras públicas.
Las dos firmas urbanizaron 220.000 metros cuadrados de terreno entre las actuales dependencias de la Aduana y el aeropuerto de Burgos para promover la llegada de nuevas compañías. Ese fue otro de los aspectos que trató el consejo de CT Burgos, que sigue debatiendo cuál es la fórmula adecuada para comercializar las parcelas.
Por un lado, cabe la posibilidad de invertir por cuenta propia en la construcción de naves para posteriormente alquilarlas por módulos.Sin embargo, también se ha puesto sobre la mesa la idea de que sea la compañía logística interesada la que corra con los gastos de ejecución de sus instalaciones. Distintos responsables de CT Burgos han estado visitando complejos logísticos en todo el país para conocer qué opción es la mejor a la hora de explotar el recinto de Villafría.
Sea como fuere, lo que sí se dio cuenta es del interés creciente de numerosas empresas y conglomerados por el recinto. A tal punto ha llegado esas muestras que en las últimas semanas han sido varias las visitas in situ para conocer las características del terreno y de su entorno. Sin embargo, aún no hay ninguna operación cerrada aunque se espera que en los próximos meses se vayan empezando a confirmar las primeras llegadas.
Año récord. CT Burgos cerró el 2022 con un beneficio insólito, que duplica la cifra conseguida en el balance de 2021. Los 418.200 euros que obtuvo este organismo público-privado vienen impulsados por la entrada en servicio de la nave de Correos Express, última que se construyó y que completó al cien por cien la capacidad de albergar nuevas empresas.
Este proyecto también tuvo que ser revisado al alza por la crisis de materiales. La ejecutora de la nave, la compañía RCS, solicitó al consejo de administración un aumento del presupuesto por la inflación. El organismo acordó elevar en 114.000 euros el precio acordado de 1,8 millones por los que se llevó el contrato.