Aurelio Medel

Hecho a mano

Aurelio Medel


Conectar la UBU al HUBU

17/12/2022

La pandemia puso en valor la sanidad pública y los profesionales lo saben. Mientras, los políticos la utilizan para sus ajustes de cuentas, como pasó en las Cortes de Castilla y León. El poder y el miedo a perderlo están detrás de la proposición no de ley promovida por PP y apoyada por Vox, en respuesta a otra iniciativa del PSOE, en la que se insta a la Junta (a ellos mismos) a que convoque al Consejo de Universidades para valorar, entre otras iniciativas, la implantación de estudios de grado de Medicina en las universidades de Burgos y León, que actualmente sólo se pueden cursar en los campus de Salamanca y Valladolid.

Es un insulto a la inteligencia que la Junta quiera ahogar la iniciativa del PSOE escondiéndose bajo las faldas de la comisión académica del Consejo de Universidades y pidiendo que sean las universidades las que soliciten el nuevo grado, cuando es obvio que lo quieren. La Junta es la competente en presupuesto y convenios con los hospitales públicos, ¿para qué necesita al Consejo? La UBU debe armarse de paciencia y acudir a dicho Consejo con argumentos. A ver si la Junta tiene arrestos para negar la nueva facultad.

La falta de médicos es estructural y se tarda diez años en 'fabricarlos', lo que hace falta es criterio y capacidad de gestión. La Fundación Conocimiento y Desarrollo ha presentado un informe que revela que el 10% de las plazas que ofertan las universidades públicas españolas quedan vacías, ratio que en Castilla y León es del 16%. Además, el 24,7% de los castellanos y leoneses que aprobaron la EBAU en 2021 terminaron en universidades de otras comunidades, el 13,3% en Madrid. Estos datos revelan que hay margen para reestructurar grados y hacer hueco a titulaciones que, como Medicina, tienen demanda y son esenciales.

Una facultad de Medicina no es una infraestructura más. Su apertura en Burgos crearía una comunidad de médicos e investigadores cuya labor trasciende a la propia universidad. Permite retener talento y dar un salto cualitativo en la sanidad pública y privada, que equivale a más calidad de vida. El HUBU cobraría todo el sentido conectado a la facultad de Medicina de la UBU y sería un complejo con un impacto transformador. Ahora que vienen elecciones y en Valladolid han abierto la puerta, es el momento de poner la cuña para que no se cierre.