La Plataforma Arroyo de la Nava anunció ayer que llevarán al Ayuntamiento de Aranda de Duero ante el Tribunal Superior de Justicia por las "irregularidades" que, a su juicio, incluye el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que el equipo de gobierno tiene previsto aprobar en unos días.

Andrés García y Enrique Ansótegui, representantes de la citada plataforma, expresaron su disconformidad con el hecho de que el nuevo PGOU considere como rústico los terrenos de Arroyo de la Nava a pesar de que el documento provisional de 2007 los calificaba como suelo urbanizable delimitado. Al contrario, aseguran no entender que los sectores Virgen de las Viñas, San Ignacio y Eras de Santa Catalina se recalificarán como urbanizables pese a ser inundables.

Denuncian que no han recibido "ninguna respuesta" a las cuatro alegaciones que presentaron y en las que incluyeron 30 sentencias con jurisprudencia al respecto. En una rueda de prensa, dejaron claro que su pretensión es que los tribunales "anulen el PGOU, totalmente o por sectores, pero que se cumpla la ley".

En este sentido, advirtieron que "si se anula el PGOU, todo lo que se construya se habrá hecho sin licencia. Si se anulan las licencias, las constructoras pedirán daños y perjuicios al Ayuntamiento, por lo que al final lo pagarán los ciudadanos". Pero no sólo eso. García y Ansótegui indicaron que si el TSJ admite su demanda "tendrá que declarar el equipo redactor, los técnicos municipales y los concejales que voten a favor".

A su juicio, en el nuevo plan urbanístico del Ayuntamiento "priman los intereses privados sobre el general. Sólo se contemplan los intereses de tres empresas".