Varios municipios de la comarca burebana han apostado en los últimos años por el turismo como motor económico, aferrándose a un sector que genera puestos de trabajo, fija población y atrae visitantes. Terrazos de Bureba no quiere ser menos y entre sus planes se encuentra la construcción de un cámping municipal anexo a la zona de baño abierta en la década de los ochenta y que clausuró con la llegada de la pandemia. Con ello, la pequeña localidad de apenas 42 habitantes dispondrá de la primera alternativa para pernoctar, tanto en tienda de campaña como en furgoneta o autocaravana.
Por otro lado, el recinto de la piscina presenta un estado bastante deteriorado y el presidente de la junta vecinal, Manuel Mato, pretende acondicionar el espacio para que cumpla la normativa actual de las instalaciones acuáticas y modernizarlo. En los años sesenta llevaron a cabo una perforación con intención de buscar petróleo que en el pueblo denominan El chorro, en la que en vez de hallar aceite negro mana agua con cierto sabor a metal. Veinte años después, el equipo de gobierno de entonces -liderado por el regidor actual- optó por levantar un recinto para que los vecinos pudieran refrescarse en los calurosos días de verano. No obstante, Carlos Mato, vocal de la pedanía, manifiesta que «nos hemos planteado transformar ese lugar en un atractivo turístico de descanso para los viajeros de paso».
En principio, pretenden que la zona para pasar la noche se ubique junto a las instalaciones en una finca de propiedad municipal, aunque «nos gustaría comprar otras para poder ofrecer el servicio al mayor número de personas», declara el concejal. Proyectan que cuente con tres áreas diferenciadas: una zona de módulos de madera para arrendar, otra para tiendas de campaña y una tercera para el estacionamiento de autocaravanas y furgonetas. A pesar de que se trata de un proyecto que aún está en proceso de desarrollo y que no prevén que se ejecute a corto plazo, los gobernantes tienen las ideas bastante claras de lo que quieren construir. Además de rehabilitar íntegramente la piscina y su entorno, consideran fundamental iluminar la zona y colocar mobiliario para velar por la comodidad de los usuarios. «Desconozco a cuánto ascenderá la inversión, pero me imagino que será alta porque queremos preparar una zona atractiva. De momento espero recibir información para datar la perforación», añade.
Por otro lado, Carlos Mato lleva tiempo detrás de edificar un punto de agua artificial para que los perros que participan en cacerías en cotos cercanos puedan beber y refrescarse, ya que el territorio es bastante seco.
Ruta por cinco pueblos. Lajunta vecinal de Terrazos ha realizado en los últimos tiempos algunas actuaciones con el fin de convertir la localidad más atractiva de cara a recibir turismo. Además de contar con una joya del patrimonio religioso como es la iglesia de San Juan Bautista, una edificación del siglo XVI con una llamativa torre campanario recién rehabilitada, otra de las paradas importantes se sitúa en la ermita de San Roque. En época estival los visitantes pueden también observar los campos repletos de cereal y girasol.
Con la pretensión de dar a conocer los «verdaderos tesoros» que se alzan en torno a Los Barrios, Terrazos, Las Vesgas, Solduengo y Barrio de Díaz Ruiz, varios vecinos han habilitado 24 kilómetros de caminos rurales para unir las localidades en una ruta etnográfica.