Mariano Ortega iniciará en pocas semanas su segunda campaña al frente del Tubos Aranda Villa de Aranda, la primera completa. El técnico catalán llegó en el mes de enero para reconducir la deriva del conjunto ribereño y ahora tratará de devolver al club a la parte noble de la División de Honor Plata.

Junto a la entidad amarilla, ha trabajado de manera prematura para poder tener confeccionada cuanto antes una plantilla equilibrada a lo que pide la categoría y así pelear por la zona alta. Ortega espera que el club pueda estar este curso en la fase de ascenso a la Liga Asobal.

¿Cómo valora sus primeros meses en el club?

Llegué a Aranda sin saber demasiado de la categoría y fue un poco de aprendizaje para conocer todo, con mucho trabajo en poco tiempo. Había un riesgo de caer en picado y lo salvamos, pero nos hubiera gustado estar en la fase de ascenso. Aun así, conseguimos ser competitivos.

¿Será distinto empezando la temporada desde cero?

Sí. Al final la temporada pasada fue un año muy convulso para el club con el descenso y tres entrenadores. Ahora se trata de comenzar de la mejor manera posible. Tenemos la ilusión de empezar desde cero y hacer un buen papel en la primera fase para poder consolidar lo que se va a trabajar y que haya una integración desde el inicio. Queremos ser competitivos en esta categoría.

¿Se ha hecho una buena plantilla?

Hemos traído los jugadores que hemos podido dentro de las posibilidades económicas. Tenemos un equipo equilibrado, una buena plantilla, aunque quizás algo corta si se produce alguna lesión de gravedad. Hay jugadores que conocen la Plata, algo fundamental, también existe un equilibrio defensaataque entre segunda y primera línea. La incorporación de Pinillos es importante por ser de la casa y estará bien acompañado con Enebral y Montiel en el central.

Tenemos una plantilla compensada y competitiva,

aunque quizás algo corta si hay lesiones

La parcela zurda cambia por completo...

Sí. José Palacios es fijo en el lateral pero tanto Mauro Jaureguiberry como Joaquín Barceló tendrán que hacer un esfuerzo y rotarán en la primera y la segunda línea para ver quién es el que más ayuda finalmente en el lateral.

Deberán alternar sus posiciones junto a Álex Berbel en la zona exterior derecha.

¿Y el resto de posiciones?

En el pivote queremos que los tres (Marcos, Pablo y Víctor) puedan defender y atacar para tener alternativas en una posición muy importante. La zona izquierda está muy bien compensada con Javi y Ander, creo que se complementarán muy bien. En la portería y en el extremo izquierdo mantenemos a todos los jugadores porque creemos que es lo adecuado y van a dar un gran rendimiento. Confiamos mucho en la figura de Alberto González.

¿Y cómo afectarán los cambios en la primera línea?

Las salidas de Nico y Elustondo serán complicadas de paliar, sobre todo Julen al ser un jugador tan polivalente. Al principio costará acoplar los mecanismos con los nuevos jugadores que no conocen mi manera de trabajar. Habrá una adaptación y tenemos que ir paso a paso.

¿Qué le parece el grupo?

No pienso demasiado en ello, hay que analizar a los rivales y ver lo que han cambiado. Más que el grupo, me parece peligroso el inicio. Empezamos fuera contra un equipo complicado como Novás y no me gusta que descansemos después. Luego hay un partido muy importante contra un recién descendido como Nava, que es el primero ante nuestra afición. Además, solo pasan cuatro a la fase de ascenso, se va a notar y será complicado.

Más que el grupo, me parece peligroso el inicio

con dos rivales duros y una jornada de descanso

¿Qué objetivo se marca el club?

Debemos ir a ganar el siguiente partido, marcar objetivos cortos, pero se sobreentiende que queremos subir, somos Aranda. Todo el mundo quiere hacer una buena temporada y meterse en el grupo de ascenso. Los propósitos son los mismos dentro y fuera del vestuario, nuestro objetivo es meternos entre los cuatro primeros para pelear por el ascenso. Si no lo conseguimos, podría denominarse un fracaso, aunque no me gusta esa palabra. Tenemos que estar preparados para aguantar la presión.

Y este año, además, hay muchos parones...

Por un lado, me parece bien que se pare todo el mes de enero ya que así puedes meter más carga sin el estrés de la competición, vendrá bien como una especie de segunda pretemporada en invierno. Lo que no me gustan son el resto de descansos, por la Copa del Rey, por partidos de selecciones y los dos descansos al ser un número impar en el grupo.

¿Cómo se siente a nivel personal en Aranda?

No he podido conocer demasiado la ciudad porque el año pasado dediqué mucho tiempo al trabajo con el equipo. Además, como mi familia vive en Burgos porque mi mujer es de un pueblo de la provincia, me suelo escapar siempre que puedo. Pero a nivel de integración, muy bien en el club, donde se respira balonmano por los cuatro costados, y con la humildad que tienen de intentar crecer y poder llegar más arriba. Aranda tiene mucho potencial en la cantera y lo ha demostrado esta temporada con varios equipos peleando por estar en el Campeonato de España y uno de ellos lográndolo. También se está trabajando muy bien la parcela femenina, algo que es muy importante.