La Colegiata de Sasamón 'estrena' crucero

P.C.P.
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La Consejería de Cultura espera terminar con los problemas en una zona del templo que ha sido objeto de numerosas reparaciones

La Colegiata de Sasamón ‘estrena’ crucero - Foto: Luis López Araico

La Colegiata de Sasamón quedará libre de andamios el 22 agosto, 8 meses después de que se iniciara una intervención con la que la Consejería de Cultural y Turismo espera terminar con los múltiples problemas en la zona del crucero del templo, que a su vez han generado numerosas y no siempre acertadas intervenciones. Además, se han revisado «todas las líneas de imposta y elementos volados de la fachada» y actuado «en aquellos puntos cuyo estado requería de intervención urgente, después de los desprendimientos acaecidos en la primavera de 2020» y en ocasiones anteriores, explica fuentes de la Administración regional.

Precisamente en el extremo meridional del crucero se encuentra una esplendorosa portada, creada a imagen y semejanza de la del Sarmental de la Catedral de Burgos.

Los trabajos, que fueron adjudicados a Rearasa por 215.905,19 euros, se han ejecutado con Fondos Feder y siguiendo el proyecto que en 2018 redactó Susana Mora Alonso-Muñoyerro y que identificaron diversos puntos débiles, como el «deterioro general de la cubierta y de su soporte», los «rejuntados inadecuados de cemento en bóvedas y paramentos y la rotura» y la «pérdida de continuidad de impostas en la fachada del ábside sur, y en el primer tramo de la torre». 

De ahí que los trabajos se hayan centrado en «devolver al crucero del edificio la estanqueidad de sus cubiertas y la integridad material de sus elementos constructivos», mediante diversas actuaciones.

Por ejemplo, desde la Consejería explican que han desmontado los tejados del crucero y repuesto la cubierta tras impermeabilizarla y han sustituido «las partes del entablado de soporte que se hallaban en mal estado» y reforzado la armadura de madera del crucero. También se ha procedido a la «protección de vanos del bajo cubierta», la «limpieza de fábricas interiores del bajo cubierta», el «rejuntado del interior del bajo cubierta, y reparaciones locales en el trasdós de las bóvedas del crucero», así como la «reintegración de impostas arruinadas en la base de la torre, y en la fachada del ábside sur», ahondan.

«En la cubierta se comenzó por el refuerzo y sustitución de vigas y correas de madera, se cambió el tablero de apoyo que estaba en mal estado para posteriormente colocar una membrana impermeabilizante transpirable y sobre ésta se ha ejecutado un entramado de rastrel de pino con fleje perforado para fijar la teja curva (nueva en canal y vieja en cobija) con ganchos de acero galvanizado», detallan los técnicos. Además, «se sustituyó el lucernario existente y se instaló una línea de vida para poder mantener en un futuro la cubierta con seguridad», para proteger todo el espacio bajo cubierta restaurado con una malla antigorrión.

«Por lo que respecta a la bóveda del coro se ha procedido a la consolidación de algunos de sus nervios por el intradós con varilla de acero inoxidable y rejuntado de grietas con mortero de cal, previo cajeado y limpieza», concluyen los técnicos.

En menos de un mes se dará por concluida esta intervención, la más urgente de las que la Iglesia Santa María la Real de Sasamón y sus vecinos demandaban desde hace años para proteger a esta joya que se empezó a construir a mediados del siglo XIII, el tercer templo de mayor tamaño de la provincia de Burgos tras la Catedral de Burgos y la iglesia de la Asunción de Melgar de Fernamental.

Un incendio durante la Guerra de la Independencia y las peculiares reconstrucciones posteriores han  provocado que su interior tenga una planta extraña y el edificio quede prácticamente dividido en dos, pero sin restarle un ápice de su interés histórico y patrimonial.