El suicidio como tema

GADEA G. UBIERNA
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El grupo de expertos APRESUIC nace con el objetivo de reducir las muertes por esta causa ayudando a activar los mecanismos de prevención y dándole visibilidad. «Queremos contribuir al cambio en la forma de hablar de ello», dicen

El grupo APRESUIC se presentó ayer y lo conforman voluntarios de ámbito sanitario, educativo y asociativo. - Foto: Jesús J. Matías

Cada vez que el psiquiatra Jesús de la Gándara habla de suicidio, cita su lema al respecto: «Nadie se ha suicidado nunca por preguntárselo, pero a muchos de los que se suicidaron nadie les preguntó nunca». Esta idea, la necesidad de sacar del ámbito de lo privado un problema de salud pública, está en la base del Grupo de Apoyo a la Prevención del Suicidio (APRESUIC-Burgos), un colectivo multidisciplinar formado por voluntarios y surgido a raíz de una iniciativa de la UBU y del Ayuntamiento. Se presentó ayer en La Estación, donde se aclaró que su objetivo es reducir las muertes por esta causa mediante una doble estrategia: activar con agilidad los mecanismos de prevención en los casos de riesgo y la visibilidad. «Queremos contribuir a un cambio en la forma de hablar del suicidio», dijeron, subrayando que no harán terapia.

El colectivo, que ya tiene perfil en las redes sociales Instagram (prevencionsuicidio.burgos) y Facebook (prevencionsuicidioburgos-APRESUIC), está formado por sanitarios (las enfermeras de Psiquiatría del HUBU Angélica del Torno y Elena García, así como por el psicólogo del HUBU Jesús Sánchez y el psiquiatra Jesús de la Gándara), por personal de la dirección provincial de Educación (Rebeca Gutiérrez y Lourdes Grijalba) y de la UBU (la decana de la facultad de Ciencias de la Salud, María Ángeles Martínez) y por el Grupo de Apoyo a Supervivientes de Suicidio (Juan Francisco Lorenzo). Todos ellos son voluntarios y ayer destacaron que, aunque la iniciativa surgió a raíz de una colaboración entre la Universidad y la Concejalía de Juventud, son independientes y están abiertos a incorporar a profesionales de otras disciplinas para avanzar en su objetivo, que es ambicioso. Sobre todo, porque la cifra anual de suicidios lleva tiempo estancada en Burgos en una horquilla que va de 32 a 38. «Prevenirlo no es fácil, pero, si dedicamos más medios humanos, avanzaremos. Y aunque solo sea por salvar una vida, merecerá la pena», dijo Lorenzo.

Los suicidios consumados en Burgos mantienen estabilidad en el tiempo, pero la enfermera Elena García afirmó que son causa creciente de ingreso en la Unidad de Psiquiatría en el HUBU. «El intento autolítico es más frecuente en mujeres, pero el suicidio consumado es más frecuente en hombres», especificó. Unas palabras que de la Gándara completó explicando que «hay tres determinantes que influyen en el suicidio: uno es biológico, otro es psicológico y el tercero es social. Cuanto más hagamos en este último, más influiremos en los otros dos».

Para ello, María Ángeles Martínez aclaró que centrarán sus esfuerzos en hacer campañas informativas y formativas, intervenciones en forma de acompañamientos y apoyos, además de mediar para posibilitar derivaciones ágiles a los lugares adecuados en caso de riesgo de suicidio. Pero en ningún caso harán terapia. 
Se puede contactar con ellos en el correo electrónico: prevenirsuicidioburgos@gmail.com