Último asalto de la primera vuelta de liga en la fase de permanencia en División de Honor Plata y duelo vibrante para el Tubos Aranda. El conjunto ribereño recibe esta tarde en casa a la UE Sarriá (19.00h.), en una cita que los pupilos de Mariano Ortega saben se antojará difícil porque su rival ya fue capaz de imponerse en el Príncipe de Asturias en su última visita hace dos temporadas, pero que, de conseguir superar con éxito, permitiría a éstos sellar casi la salvación.

«Está claro que inconscientemente siempre se mira un poco la línea roja por debajo», ha señalado el propio Ortega en declaraciones previas al partido haciendo alusión a esa ansiada permanencia, pero también, reconociendo que «nosotros, somos ambiciosos», por lo que lo único a lo que aspirarán sus jugadores esta tarde ante los gerundenses será a ganar.

Para conseguirlo, deberán ser capaces de superar a un Sarriá que llega a la capital ribereña en la antepenúltima posición de la tabla con 8 puntos, pero que como ha valorado Ortega será un adversario difícil porque, a pesar de que quizá le «falta algo de lanzamiento exterior»,  hacen «buen balonmano» y «durante muchos minutos en esta fase ya han tenido varios partidos con marcador a favor». También porque, apostilla, «puede que sea el rival más incómodo de atacar» al practicar diferentes variantes atrás y ser «muy móviles». Hecho por lo que, «si no estás bien, puedes entrar en una dinámica de errores que aprovechen».

De cara a la cita, destacar que Mariano Ortega podrá contar con prácticamente toda su plantilla a excepción del primera línea argentino Santiago Cánepa. El extremo serbio Pavle Banduka, con molestias durante toda la semana, también se antojará duda.