El equipo de gobierno de la Diputación, integrado por PP y Cs, aprueba su primer presupuesto de la legislatura, que asciende a 115 millones de euros, con el apoyo del diputado de Vox, Nicasio Gómez, y el voto en contra del Grupo Socialista, que calificó el documento de «decepcionante». Además, en la misma sesión plenaria se aprobaron las bases de los Planes Provinciales dirigidos a municipios y a entidades locales menores, que ascienden a 24 millones de euros en total. 

El portavoz de CS, Eduardo Munguía, que también preside la comisión de Planes Provincia, defendió los cambios que se han introducido en las bases, como por ejemplo que no se prime la presión fiscal de los ayuntamiento, y la integración de todas las convocatorias en una única «para que los ayuntamientos destinen el dinero a los que consideran más necesario». En el mismo sentido se manifestó el portavoz del PP, Borja Suárez, quien señaló que este año «será de prueba» para ver si funcionan esos cambios introducidos. 

Desde la bancada socialista, su portavoz, David Jurado, manifestó que eliminar el criterio fiscal «es injusto y generará el efecto contrario a lo que pretenden». Además, Jurado manifestó que «es mentira que este año vayan a invertir 24 millones de euros porque no pueden gastar lo que no tienen, en el mejor de los casos los invertirán en dos años». Tanto PP como Cs aseguraron que el presupuesto «recoge las demandas de nuestros pueblos y vecinos».