La Avícola valora un cambio de estatus

L.M.
-

El nuevo administrador concursal de la empresa admite la posibilidad de cambiar el modelo jurídico de cooperativa, bajo el que se fundó Cobur en 1948, aunque siempre respetando unos criterios

Las instalaciones de la Cooperativa Avícola acogieron una reunión entre Ayuntamiento,FAE, sindicatos y representantes de Cobur. - Foto: Luis López Araico

Desde el pasado 22 de abril la Cooperativa Avícola de Burgos se encuentra en concurso de acreedores. Durante esta primera fase, denominada común, el despacho madrileño que ha tomado las riendas está llevando a cabo numerosas reuniones y encuentros para tratar de salvar la delicada situación financiera por la que atraviesa una de las entidades más conocidas en toda la ciudad, y que da trabajo a un centenar de burgaleses de manera directa y casi un millar indirecta.

Ante la grave deuda que acumula Cobur, el administrador concursal ya ha planteado ante el consejo rector y los trabajadores la posibilidad de un cambio del modelo jurídico, dejando de lado el estatus de cooperativa bajo el que se fundó en 1948 para adoptar otro distinto. «Valoramos la posibilidad de que venga una empresa que se encargue de la explotación de las instalaciones y llegue a algún tipo de acuerdo comercial con los cooperativistas, ampliando el concepto de socio para seguir ya no bajo la estructura jurídica de cooperativa sino en una sociedad que continuara dando los mismos servicios», explicó ayer el nuevo gerente que ha tomado las riendas del negocio.En las instalaciones de la Avícola se reunieron el alcalde de Burgos,Daniel de la Rosa, el presidente y la secretaria general de FAE, Miguel Ángel Benavente y Emiliana Molero y los secretarios provinciales de CCOO yUGT, Ángel Citores yPablo Dionisio Fraile, acompañados por sus dos delegados en el comité de empresa, que conocieron de primera mano el panorama de la entidad. Los requisitos que se le exigen a ese posible tercero que podría tomar las riendas de la Avícola son, entre otras, el mantenimiento de la actividad actual de las instalaciones del Monte de la Abadesa «en su conjunto», es decir, incluyendo tanto el área de piensos -altamente rentable- como el matadero, la incubadora o las oficinas y asumir los máximos puestos de trabajo.

Además, desde el consejo rector se explicaron los grandes problemas que están teniendo para lograr captar una gran superficie a la que suministrar los pollos que sacrifican. «Si el mercado avícola, que ya de por sí era pésimo, fue en 2019 demoledor», indicó su presidente, que aseguró que en canal de distribución de sus productos «es complejo y con poco margen». Es por ello que están a la búsqueda de un socio que les ayude a llevar los pollos hasta los lineales de los supermercados, tanto a nivel nacional como internacional. «Necesitamos a alguien con contactos urgentemente», urgió, a la vez que planteó también la acuciante necesidad de acceder a líneas de crédito que permitan a la Cooperativa solventar los pagos pendientes, especialmente con sus proveedores.

intercesión. Es ahí donde entra la figura del Ayuntamiento de Burgos, representado en la figura del alcalde, Daniel de la Rosa, que fue el que concertó el encuentro para conocer la realidad de Cobur.El regidor se comprometió a transmitir esta problemática a la delegación del ministerio de Industria con la que se reunirá uno de sus ediles esta semana, y que servirá para abordar una infinidad de temas pendientes entre la ciudad y la capital de España. «Desconozco las líneas que ofrece elGobierno para situaciones como estas, pero les trasladaré vuestra cuestión», apuntó De la Rosa, que puso en valor las excelentes instalaciones con las que cuenta Cobur y el grato recuerdo y valoración que tienen los burgaleses de la compañía.

Por su parte, desde FAE, su presidente recordó que, siendo la Avícola una cooperativo, «será más fácil ponerse los socios de acuerdo para asegurar la viabilidad de la empresa que si fuera una sociedad», apuntó Miguel Ángel Benavente, que apostó por reflexionar para saber los motivos que han llevado a esta situación. «Más interés que los 500 cooperativistas no va haber en ningún sitió», afirmó.

Los sindicatos, que no se mostraron contrarios a las iniciativas de la nueva gerencia, sí que reclamaron al administrador y al consejo rector volver al modelo anterior reabrir el matadero, ya que recordaron que esta forma de trabajar se mantuvo durante muchos años y nunca dio problemas. «Antes con 29 profesionales funcionaba, lo realquilaron y metieron a 80 y fue un desastre», lamentaron desde CCOO.Por otro lado, desde UGT abogaron por un mantenimiento de los puestos de trabajo y recordaron que las instalaciones de sacrificio «son de lo más punteras que puede haber en todo el país». Además, tanto Citores comoFraile coincidieron en sus alabanzas a Cobur por su larga trayectoria y abogaron por buscar la solución más viable para todas las partes que ayude a una entidad que suma más de 70 años en funcionamiento.