El Centro Integral de Formación Profesional (CIFP) Santa Catalina vuelve a ponerse a la cabeza de la FP a nivel regional al ser uno de los institutos formativos escogidos por la Junta de Castilla y León para trabajar con la nueva metodología de aprendizaje que se quiere empezar a implantar a nivel regional en estas enseñanzas. De hecho, este centro arandino es el único ubicado en una ciudad que no es capital de provincia, compartiendo proyecto con los CIFP Río Tormes de Salamanca, Juan de Herrera de Valladolid y Pico Frentes de Soria.
Este proyecto lleva por nombre Del problema al reto: un equipo para cada situación, y se resume en un cambio de paradigma en el aula. «La clave de este modelo es trabajar en equipo, tanto el profesorado como los alumnos, ese es el gran reto al que nos enfrentamos», resume Francisco Zanfaño, coordinador del equipo docente que se está formando en este proyecto, que será el que el próximo curso trabaje «mano a mano con los alumnos, que también trabajaran en equipo y que se enfrentarán a retos, a partir de los cuales van a aprender, dejando lo tradicional de tema 1, tema 2,...», como especifica Zanfaño. «La metodología clásica se basa en aulas donde el profesor tiene el papel predominante y todo eso va a cambiar, en la FP con más razón porque es una formación muy profesional», recalca después de haber participado en este curso en el primer tramo formativo de esta iniciativa.
Para dejar atrás el método docente que se ha venido siguiendo hasta ahora, la Junta de Castilla y León ha marcado como ejemplo el modelo vasco, con más de diez años de experiencia y considerado como «uno de los mejores del mundo ahora mismo», recalca el coordinador del equipo del CIFP Santa Catalina. Para conocerlo, han acudido a varias sesiones al Centro de Innovación para la FP del País Vasco, denominado Tknika, «donde se lleva desarrollando e implantando en los centros de FP este nuevo modelo de aprendizaje colaborativo basado en retos con un enorme éxito», resalta Zanfaño.
Una de las ventajas que se destacan en torno a este modelo de aprendizaje es que los equipo docentes deben ser capaces de desarrollar retos en el aula con sus alumnos, apostando por el talento, la sostenibilidad y los valores más demandados en cualquier perfil profesional, como son el trabajo en equipo, la resiliencia o la iniciativa.
Durante el curso que ahora acaba, el que será el equipo docente para este nuevo método en el CIFP Santa Catalina se ha estado formado para, ya en el próximo curso, trasladar lo aprendido a la práctica con los alumnos del ciclo formativo de Grado Superior de Mantenimiento Electrónico, que serán los primeros en beneficiarse de las ventajas de esta nueva forma de aprendizaje. Se eligió este grado porque tiene una plantilla de profesorado estable, una elevada tasa de inserción laboral de los alumnos de prácticamente el 100% y una gran demanda de trabajadores del sector en distintas empresas de la comarca.
De momento, convivirán las dos formas de enseñanza para que el cambio sea paulatino y ya se está creando un aula de alto rendimiento adecuada al trabajo en equipo y colaborativo para que los alumnos puedan sacar el máximo partido a este método de aprendizaje en las instalaciones del centro.