La Plataforma de Bomberos Profesionales de Castilla y León no da crédito a la compra por parte del Ayuntamiento de Burgos de varias motosierras que están siendo utilizadas ya por la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil. Además de considerarlo una «temeridad», denuncian que incumple la legislación y lo ven como un claro ejemplo de «intrusismo» que no descartan, «si hace falta», llevar hasta los tribunales. 

La sorpresa se produjo tras ver hace unos días en las redes sociales a voluntarios de Protección Civil cortando un pino de grandes dimensiones que se había venido abajo en el parque de Fuentes Blancas. «¿Se les imaginan realizando una prueba de alcoholemia o conduciendo un autobús? ¿Le gustaría a la técnico que cuatro voluntarios fueran a rescatarla si tiene un accidente de tráfico?», se pregunta indignado el vicepresidente de la Plataforma, Juan Carlos Prieto.

Prieto recuerda que Protección Civil es una agrupación formada por personas que, en el ejercicio de esta actividad, «no son trabajadores ni profesionales». Son voluntarios. Y son a los bomberos a los que les corresponde intervenir en las situaciones de emergencia.

Además de poner en manos de voluntarios una herramienta que puede llegar a ser peligrosa, Prieto defiende que el área de Protección Civil tiene una función «colaboradora con la Policía y los Bomberos» y no la conforman profesionales de emergencias. Y de la misma manera que a nadie se le ocurriría que pudieran llevar una pistola táser o que se les pudiera comprar una barredora, tampoco entienden que se les hayan facilitado varias motosierras.  

«Si nos buscan las cosquillas nos van a encontrar», defiende Prieto antes de exigir a Protección Civil y, por extensión, al Ayuntamiento que rectifique y deje de realizar trabajos de este tipo. «No puedo entender cómo interpretan las leyes algunos políticos ni la técnico de Protección Civil», lamenta.