El auge en la popularidad de la escalada deportiva, reforzada aún más tras la medalla de oro lograda en los Juegos Olímpicos de Tokio por el joven extremeño, Alberto Ginés, ha llevado a la empresa Skala Roco (constituida mayoritariamente por un grupo de inversores burgaleses) a proyectar la construcción de un rocódromo de alto nivel en la última ampliación del polígono de Villalonquéjar, en las traseras del cementerio. El Consorcio ha aprobado ya la adjudicación de la parcela, de unos 3.000 metros cuadrados, y la previsión es que los trabajos para levantar la futura instalación deportiva arranquen en los primeros meses de 2022 y concluyan en el último tramo del próximo año.
Fuentes de la empresa detallan que Burgos tendrá «uno de los 5 mejores rocódromos de España, al nivel de los que existen en Madrid, Barcelona o en otras grandes capitales europeas». Para hacerlo realidad, Skala Roco asumirá una inversión que superará el millón de euros y que servirá para levantar una nave de más de 15 metros de altura que, más allá de las actividades propias de la escalada deportiva sobre la que bascula el proyecto, contará también con un gimnasio, un gastrobar, un parque para el disfrute de los niños, un espacio de fisioterapia y otros para actividades como crossfit, pilates, yoga...
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